POR Christian Montero | 25 de enero de 2017, 13:55 PM

Hace una semana el crimen de cinco jóvenes estremeció al barrio La Victoria en Liberia y a todo un país.

Joseph Briones Solís, Stephanie Hernández García, Dayana Martínez Romero, Íngrid Masiel Méndez Serrano y Ariel Antonio Vargas Condega fueron encontrados sin vida dentro de uno de los tres cuartos de la vivienda que alquilaban.

Todas las víctimas fueron degolladas según determinó el OIJ y la única sobreviviente fue una menor de 14 años, prima de Stephanie.

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El sangriento hecho dejó una secuela entre los vecinos de las víctimas quienes viven entre la angustia y el temor.

Agentes del OIJ todavía recorren el barrio La Victoria y las calles aledañas en busca de más pistas.

Preguntan una y otra vez si alguno de los habitantes oyó o vio alguna persona extraña o movimientos fuera de lo normal en ese sitio, pero la respuesta es la misma: nadie vio nada.

La policía judicial reconstruyó las últimas de los muchachos antes de ser asesinados.

Los novios Joseph y Stephanie estuvieron el miércoles pasado, de cinco de la tarde a nueve de la noche en la UCR de Liberia, llevando cursos de sus carreras de administración de negocios y educación.

Dayana compartió desde las cinco de la tarde con una amiga que vive en el centro de  Liberia y se presume que de ahí se habría ido al apartamento.

Mientras que Íngrid y Ariel fueron al estadio Edgardo Baltodano a ver el juego entre Liberia y la Liga tras el juego se fueron a la casa que se ubica como a un kilómetro de distancia y Ariel le habría pedido a Íngrid hospedaje.

Este miércoles estudiantes de la UCR, la UNA y la Universidad Técnica Nacional marcharon por el centro de Liberia exigiendo un alto a la violencia.

La única sobreviviente de la masacre ya salió del hospital.