POR Luis Jiménez | 10 de diciembre de 2024, 9:31 AM

Este martes, el Organismo de Investigación Judicial (OIJ), en conjunto con la Fiscalía y Recope, realizó 55 allanamientos para desarticular tres organizaciones criminales dedicadas al robo de combustible en las zonas de Turrialba y Limón cuyo perjuicio económico asciende a más de ₡5.700 millones de colones.

Las investigaciones, que abarcaron el hurto de gasolinas, diésel y combustible de aviación (Jet A-1), responden a denuncias interpuestas por la Refinadora Costarricense de Petróleo (Recope) a principios de este año.

Según la presidenta ejecutiva de la institución, Karla Montero, estas acciones permitieron identificar patrones de irregularidades en la distribución del combustible.

“Hoy se están ejecutando dos denuncias que interpuso Recope ante el OIJ. La primera se presentó en febrero en la zona de Turrialba porque notamos un aumento en las tomas ilegales. 

"La segunda surgió en Limón, donde detectamos diferencias volumétricas entre las cantidades de combustible que llegaban en los barcos y lo registrado en nuestra terminal en Moín”, explicó Montero.

Estas investigaciones se convirtieron en los primeros casos de robo de combustible catalogados como crimen organizado en Costa Rica, según Montero.

Entre los principales sospechosos destacan tres funcionarios de Recope quienes, según las autoridades, habrían facilitado información clave para la sustracción ilegal del combustible.

Tres funcionarios de Recope colaboraban con la extracción ilegal de combustible en diferentes puntos. En Limón se están desarticulando tres grupos criminales, liderados por alias 'Macho Coca', 'Gordillo' y 'Mafia'. 

"En Turrialba, dos hombres controlaban las operaciones desde los ductos que pasan por la zona”, detalló Randall Zúñiga, director del OIJ.

Alias "Macho Coca", identificado como Bell Fernández, lideraba una de las organizaciones en Limón, actualmente está detenido y cumple prisión preventiva.

Otro grupo estaba encabezado por un hombre de apellido Soto, conocido como "Gordillo", quien tiene gasolineras en Sarapiquí, Horquetas y Poás. El tercer grupo en esta región era dirigido por un hombre de apellido Salas, alias "Mafia", vinculado a negocios en Guápiles y sospechoso de legitimación de capitales.

En total, las autoridades esperan detener a 33 personas, 15 de ellas en Turrialba y 18 en Limón, como parte de este operativo que busca frenar un daño económico de ₡5.708 millones de colones.

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