Sucesos
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Este hecho ocurrió en barrio El Bosque de Oreamuno.
Una banda vinculada con 11 robos a casas, en Moravia y Goicoechea, aprovechaba que sus dueños dormían para trepar muros o verjas, ingresar a cocheras y sustraer bienes de valor.
Estos crímenes se daban en horas de la madrugada, cuando el grupo -ahora desarticulado-, aparentemente, rondaba por las calles en busca de un “blanco fácil”, explicó a Telenoticias el jefe de Unidad de Investigación de la Sección de Hurtos del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), Dowglas Rodríguez. (Observe el video adjunto)
"Este grupo radicaba en el sector de Guadalupe (Goicoechea) y lo que hacían es que, en horas de la madrugada, esto por ser adictos, iban y caminaban por Guadalupe, Moravia y Coronado. Cuando ellos ya tenían una vivienda que ellos creían que podía ser un blanco fácil para el robo, ingresaban a esta, ya fuera por el escalamiento por las tapias de las casas o por las verjas, siendo que cuando ingresaban caían en las cocheras y aprovechaban para sustraer de los vehículos las pertenencias que había dentro, detalló el funcionario de la Policía Judicial.
De acuerdo con Rodríguez, en ocasiones, los sospechosos forzaban los llavines e ingresaban a los inmuebles, donde robaban, por ejemplo, celulares, billeteras, computadoras o tarjetas de crédito. Estas últimas, de hecho, posteriormente eran utilizadas en comercios cercanos.
El OIJ detuvo el viernes, como sospechosos de integrar el grupo, a tres hombres de apellidos Arroyo Godínez (36 años), Herrera Barahona (36) y García Soto (38), así como a dos mujeres, de apellidos Fernández Chinchilla (45) y Chavarría Coulson (21). Todos ellos fueron capturados mientras permanecían en vía pública en Guadalupe de Goicoechea.
Respecto al papel que jugaban las mujeres en los robos, el funcionario destacó que, según la investigación, tenían una labor de alertar en caso de que se aproximaran oficiales o grupos de vecinos.