Las carreras ilegales de vehículos vuelven a tomar las calles de nuestro país a pesar de que el inicio de la pandemia y los fuertes operativos por la restricción vehicular trajeron una pausa a los piques.
En los últimos meses se han retomado las competencias de velocidad en sitios como Pavas, autopista Florencio del Castillo y la Ruta 27.
La restricción vehicular sanitaria nocturna no frena este tipo de carreras.
Los piques se dan a altas horas de la noche y en días específicos.
Los picones no solo se exponen a multas sino también a sanciones penales.
El Código Penal establece penas de 1 a 3 años de cárcel a los conductores que participen en carreras ilegales.
A los organizadores de piques se le podrían sumar otros delitos.
Los controles para evitar este tipo de carreras se hacen de forma articulada entre distintos cuerpos policiales.