La Superintendencia de Pensiones (SUPEN) arremetió este jueves contra el proyecto de ley que permitiría adelantar la pensión del régimen de Invalidez, Vejez y Muerte (IVM) mediante los recursos del Régimen Obligatorio de Pensiones (ROP).
La propuesta, presentada hace apenas una semana por el liberacionista Gilberth Jiménez, fue calificada como “ilusoria” y “cortoplacista” por la superintendente Rocío Aguilar, quien cuestionó el impacto que podría tener en la sostenibilidad de la Caja Costarricense de Seguro Social.
“Como ente técnico, la SUPEN llama la atención para que salvaguardemos las bases sobre las cuales se ha venido consolidando un régimen de pensiones multipilar de manera que, no es con soluciones cortoplacistas como se va a lograr una pensión digna para nuestros adultos mayores, sino con la determinación de seguir fortaleciendo lo que hemos construido”, aseveró.
La iniciativa, tramitada bajo el expediente 23.547, permitiría adelantar hasta en ocho años la edad de pensión (57 en lugar de 65 años) mediante el pago de una suma que compense las cuotas dejadas de pagar, que en prácticamente todos los escenarios es un monto millonario.
“La posibilidad de pagar el retiro anticipado de cinco a ocho años no deriva en una medida sustancial en la sostenibilidad de la CCSS, sin embargo, conlleva un claro costo para los afiliados, por cuanto las personas deben hacerles frente a las cuotas que habrían cotizado, así como a los montos de pensión mensuales, además del aguinaldo y el pago del Seguro de Enfermedad y Maternidad”, añadió la SUPEN.
La justificación de Jiménez, que hoy también defendió su propuesta en el Plenario, es que actualmente se permite ese adelanto de pensión, pero a cambio de pagos “multimillonarios” que se alejan de las posibilidades de la mayoría de ciudadanos.
“Actualmente, los trabajadores cuentan con alguna posibilidad de poder adelantar el retiro de su pensión y poder jubilarse; sin embargo, para ello deben cancelar montos multimillonarios, que en ocasiones se sale de toda posibilidad de cualquier ciudadano costarricense y deben recurrir a préstamos y acciones, sacrificando todo lo que han ahorrado.
“Por eso, tenemos una posibilidad potencial para que aquellos recursos del ROP se conviertan en un proyecto de calidad de vida”, aseveró.
Aguilar insistió en que las pensiones que hoy paga el IVM no se encuentran “suficientemente respaldadas” por los aportes futuros y las reservas actuales, incluso sin una amenaza como de la propuesta en discusión.
“Esta situación podría empeorar por la presencia de retos estructurales como el desempleo y la informalidad, por lo que esta iniciativa podría tener un efecto negativo a mediano plazo en el Sistema Nacional de Pensiones, al debilitar el pilar complementario y aumentar la dependencia del régimen básico.
“Aunado a lo anterior, adelantar la pensión es algo sumamente oneroso, ya que las pensiones de los regímenes básicos se financian con aportes del patrono, el Estado y el trabajador, y financiar estos tres aportes excede la capacidad de ahorro del trabajador promedio en el ROP”, sentenció la superintendencia.