El Gobierno presentó este lunes a los jefes de las diferentes fracciones legislativas un plan para “neutralizar” el impacto que el conflicto armado entre Rusia y Ucrania está teniendo en la economía costarricense.
Entre otras, el Ejecutivo propone una deducción temporal del impuesto sobre la renta para los sectores de transporte de carga, remunerado de personas (taxis y autobuses) y de actividades agrícolas, todos a partir del consumo de combustible que reporten.
Dichas rebajas en sus impuestos serían de entre ₡78,15 y ₡92,40 por litro.
De igual forma, se recomendó una reducción en los ingresos de la refinadora de hasta un 80% en el llamado “Rédito para el Desarrollo”, dentro del margen operativo de Recope.
También una reducción temporal de 25% en el margen en comercialización y transportes, esto para los sectores que se dedican a la venta y transporte de combustibles.
“Estas últimas tres propuestas tendrán incidencia directa en la fórmula del cálculo del precio de los combustibles y mitigarán el impacto generado por los bruscos aumentos en el precio internacional del petróleo y sus derivados”, dijo el Ejecutivo.
A su vez, el Gobierno solicitó a los diputados impulsar tres proyectos de ley complementarios: uno para eliminar el aporte que Recope hace al fondo de ahorro y garantía de sus trabajadores y otros relativos a la aprobación de millonarios créditos con el BIRF y la AFD para el recambio de la deuda.
A todas estas propuestas se una la de congelar el impuesto a los combustibles que ya está en la Asamblea Legislativa y fue dispensada de todo trámite.