Ante la ola de criminalidad que vive el país, la Asamblea Legislativa ha concentrado sus esfuerzos en analizar y discutir proyectos que permitan hacerle frente a la crisis. Por ejemplo, iniciativas relacionadas con las intervenciones telefónicas, las reglas para aplicar la prisión preventiva, el fortalecimiento de los tribunales de flagrancia, o la ley que sanciona el delito de préstamo de dinero gota a gota.
Sin embargo, para tres analistas políticos, esto ha relegado el debate de otros temas importantes y urgentes para el país.
El analista Daniel Calvo afirma que todo lo relacionado con la reactivación económica ha pasado a un segundo plano.
Aunado a lo anterior, los temas que de alguna forma tienen que ver con mejorar la seguridad del país en términos preventivos, como lo es la educación. En este sentido, Calvo afirmó que solo hay una concentración en las medidas de contingencia.
Por su parte, la analista Fanny Ramírez coincidió en que la educación ha sido un tema dejado de lado, a lo que sumó una ausencia de proyectos relacionados con la salud, el agua y las reformas electorales.
“Por supuesto, el tema de seguridad es muy importante, pero no es lo único y es necesario que se avance en otros sectores y otros ámbitos de la sociedad”, comentó Ramírez.
Para el analista Sergio Araya, la dinámica monotemática es un patrón que se repite en la Asamblea.
“Hoy se trata de seguridad, pero en otro momento lo único en lo que se concentraban era en la jornada flexible 4x3”, afirmó Araya.
Él coincidió con sus colegas en la necesidad que existe de que los diputados se concentren en las reformas políticas y en proyectos para reactivar la economía.
Los tres están de acuerdo en que tampoco ha habido un dinamismo mayor en el Congreso, y que los legisladores sostengan conflictos constantes con el Poder Ejecutivo.
“Ofensas y descalificaciones por parte del Presidente de la República complican enormemente la tarea de que la Asamblea Legislativa no caiga en distracciones. En esos llamados a cuentas al Presidente para que no pierda el respeto, se pierde el tiempo productivo para que se aprueben proyectos importantes, ni en los mismos proyectos de seguridad se han podido avanzar con la velocidad deseada”, aseveró Calvo.
Este punto también fue compartido por Araya, quien indicó que se ha invertido el tiempo en constantes interpelaciones a ministros, llamadas a comparecencia a comisiones y en la creación de comisiones especiales investigadoras.
Otro factor de atraso, según lo analiza Ramírez, es que los legisladores le han dado importancia a sus propias agendas individuales de cara a las pasadas Elecciones Municipales e incluso a las próximas nacionales.