El Congreso aprobó, esta tarde, una dispensa de trámite al expediente 22.914, que congelaría el impuesto único a los combustibles por un año.
La propuesta, presentada por el socialcristiano Erwen Masis, defiende la fijación de un monto máximo para ese tributo como una forma de intentar paliar el aumento sostenido que enfrentan los precios internacionales producto del conflicto armado en Ucrania.
El proyecto permitiría, entonces, que el monto no aumente luego de las revisiones trimestrales que por ley recibe el impuesto; eso sí, si se tratara de una baja, la cifra sí variaría.
“La vulnerabilidad en los mercados internacionales, tras el conflicto entre Rusia y Ucrania, y la variación en el tipo de cambio proyectan más aumentos en los derivados del petróleo. El barril alcanzó cifras históricas que tendrán un impacto en todo el sector productivo, particularmente aquellos que dependen altamente del consumo energético para la producción y la movilidad, como lo es el agro, el turismo, el comercio, la construcción, el transporte público”, dijo Masís.
La dispensa de trámite permitiría que el texto no pase por comisión, sino que llegue directamente al Plenario Legislativo, donde será discutido y puede ser modificado si así lo deciden los legisladores.
El Gobierno ya había presentado una propuesta en esa misma línea, que ha sido cuestionada por no contar con un mecanismo de compensación.
Esa discusión podría empezar la próxima semana, según la voluntad del Congreso.