Internacional
Tonga queda aislada del mundo tras erupción de volcán
La conexión a internet podría estar cortada varias semanas para las cerca de 100.000 personas que viven en el país.
Un análisis realizado por el vulcanólogo del Observatorio Vulcanológico y Sismológico de Costa Rica (Ovsicori), Javier Pacheco, mostró el recorrido de la onda sonora provocada por la erupción del volcán submarino en Tonga y captada por lo sensores de esta entidad.
El sábado 15 de enero un volcán submarino hizo erupción cerca de la Isla de Tonga en Oceanía, una actividad considerada por expertos como la más grande registrada en el planeta durante los últimos 30 años. Desde ese día a este lunes, se han registrado tres erupciones más.
A partir de esta actividad se registraron olas Tsunamis llegando a costas del Pacífico, no solo de la misma isla, sino también de países tan lejanos como Perú y México. Olas de mayor altura se registraron también en Costa Rica.
La onda sonora fue registrada diez horas después del evento, por los sensores de infrasonido ubicados en los volcanes Rincón de la Vieja, Poás, Irazú y Turrialba.
La velocidad de las ondas viajando en la atmósfera se calcularon en 1100 kilómetros por hora.
¿Podría suceder algo similar en Costa Rica?
Vulcanólogos consideran que es poco probable que una erupción submarina como la ocurrida en la Isla de Tonga pueda ocurrir en aguas de América Central.
Cyrill Muller, vulcanólgo del Ovsicori, explicó que esto se debe a que, a pesar de que hay volcanes submarinos en la zona del Pacífico, estos no muestran actividad, tal es el caso de los que existen por Isla Galápagos e incluso el monte volcánico de la Isla del Coco.
Por esta razón, aunque nunca se puede predecir a la naturaleza con exactitud, sería difícil que algo así ocurriera en esas mismas condiciones, agregó.
El vulcanólogo Raúl Mora coincidió y afirmó que lo ocurrido en Tonga es algo extraordinario y la probabilidad de que en Costa Rica ocurra algo igual es bajo debido a la poca o nula actividad volcánica submarina.
Mora agregó para dimensionar que incluso la erupción de 2021 del Volcán la Palma en Islas Canarias se puede considerar como muy pequeña, al menos comparada con la del volcán en Tonga. Algo así no se ve en América Central.
Por su parte, Muller afrimó que en el caso de Costa Rica las cordilleras volcánicas activas están en tierra, por lo que una erupción marítima no sería una posibilidad, ya que los grandes volcanes nacionales se encuentran en tierra.
Marino Protti, vulcanólogo del Ovsicori, explicó que algunos volcanes que están en Guatemala, Nicaragua y el Golfo de Fonseca podrían producir, durante una erupción grande, un tsunami, pero de características menores y con una afectación localizada.
Gino González, de Volcanes sin Fronteras, explicó que la cordillera submarina del Coco es la más grande de Centroámerica y sirve como una especie de barrera contra los Tsunamis.
Si bien esto no garantiza una protección al cien por ciento, sí disminuye el impacto que pueda ocurrir por Tsunamis de otras partes del mundo, aseguró.
Vulcanismo de Costa Rica
Aunque algo con las mismas características de Toga no es probable tomando en cuenta las características de la zona geológica donde se encuentra Costa Rica, Mora advierte que ese volcán sí comparte un elemento importante con la mayoría de los volcanes nacionales y es que se categorizan bajo el tipo de vulcanismo más peligroso: el explosivo.
El experto indicó que existen dos tipos de vulcanismo, el efusivo y el explosivo. El efusivo se asocia a las coladas de lava, como las que en algún momento se vieron en el Volcán Arenal o incluso las del Volcán La Palma, que si bien pueden afectar a personas o infraestructura que estén cerca de la zona, suelen ser eventos más manejables.
Por su parte, el explosivo se refiere a esas erupciones sorpresivas y altamente destructoras, ante las cuales no hay margen de acción, ese es el caso del pequeño país centroamericano.