POR Dagoberto Alfaro | 20 de mayo de 2016, 15:00 PM

Los niveles de contaminación del ambiente han aumentado hasta tres veces tras las erupciones del volcán Turrialba.

Una nube gris de ceniza del volcán cubrió Coronado y Guadalupe, con gran ayuda del viento.

Cerca del segundo circuito judicial en Goicoechea y el parque de Guadalupe la visibilidad era complicada.

Y como consecuencia, irritación y malestar en ojos y garganta.

La caída de ceniza ocurrió a las 9:00 de la mañana. Una fina alfombra de polvo cubrió suelos, garajes y entradas de casas.

Y hasta los vendedores sufrieron con eso.

Al mediodía, la ceniza todavía suspendida en el aire se percibía. Lo que provocó el malestar pero fue combatido con mascarillas.