Médico de empresa sospechó de fiebre de Oropouche tras viaje de tica a Perú

Las sospechas sobre un caso de fiebre de Oropouche en Costa Rica surgieron porque, recientemente, la paciente viajó a Perú, país suramericano que registra casi 300 diagnósticos de la enfermedad.

Las autoridades sanitarias recibieron la alerta desde un centro de trabajo, donde el médico de empresa consideró que ese antecedente de viaje y los síntomas serían compatibles con el virus.

“Todavía no se ha logrado confirmar la sospecha, es alguien a quien vieron en un consultorio de empresa y que había viajado, por asuntos de trabajo, a Perú, y que presentó un cuadro clínico compatible con Oropouche; entonces, lo reportaron como tal. 

“No hay muchos datos que confirmen, hemos tratado de hacer la investigación. En el lugar en que fue atendida, no se le tomó la muestra. Los compañeros de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) del área de salud respectiva le tomaron la muestra, que está procesándose en Inciensa”, detalló el doctor Roberto Castro, director de Vigilancia de la Salud.

Según Castro, este mismo miércoles se podría confirmar o descartar la enfermedad, ya que los resultados de la muestra de sangre estarán disponibles en horas de la tarde.

Sobre la paciente, el funcionario explicó que “está en muy buen estado de salud”, al tiempo en que enfatizó que la fiebre de Oropouche no presenta “un cuadro clínico peligroso, con una letalidad baja”.

Esta enfermedad es transmitida por vectores: entre las personas se propaga por la picadura del mosquito Culicoides paraensis (también conocido como jején, purruja o mosquito de la arena). Otros mosquitos, como Culex quinquefasciatus —ampliamente distribuido en Costa Rica— también pueden ser vectores de transmisión.

Los síntomas, que pueden durar de cinco a siete días, incluyen aparición repentina de fiebre, dolor de cabeza, rigidez en las articulaciones, dolores, molestias y, en algunos casos, visión doble, náuseas y vómitos persistentes.

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