Sucesos
Pleito entre estudiantes dejó 24 heridos en el Instituto de Alajuela
Al parecer, uno de los menores inició la golpiza contra varios compañeros, hombres y mujeres.
Tras el pleito en el Instituto de Alajuela, el Ministerio de Educación Pública (MEP) aseguró, por medio de su Dirección de Vida Estudiantil, que "la violencia en los centros educativos es inaceptable y la sana convivencia es indispensable para impulsar y consolidar una educación de calidad".
Esta reacción llega luego de que, este jueves en horas de la mañana, se desatara una riña en el colegio alajuelense: 24 menores resultaron heridos, 16 de ellos trasladados estables al Hospital San Rafael.
“La violencia en centros educativos y fuera de estos es una dinámica social que involucra no solo a la comunidad educativa, sino a las familias, comunidades, instituciones públicas locales y nacionales. Es urgente habilitar espacios de diálogo de escucha y análisis del entorno educativo para evitar este tipo de situaciones”, dijo Gabriela Valverde, directora de Vida Estudiantil del MEP.
Declaraciones de Gabriela Valverde:
Según Valverde, hay situaciones que no se pueden prever; por eso, es necesario un trabajo preventivo constante y sistemático, no esperar a que sucedan este tipo de hechos para actuar y activar los protocolos.
Explica, además, que las familias, las comunidades, el personal de los centros educativos y la población estudiantil tienen que trabajar unidos y colaborar entre sí por el bien común.
“Todos los centros educativos cuentan con equipos de trabajo que tienen como fin analizar cómo está la convivencia entre el estudiantado y las prioridades de los centros. Hacemos un llamado para que estos equipos se activen y revisen si hay situaciones o sospechas de ellas, para que se actúe de inmediato”, comentó Valverde.
Ricardo Barrantes, director del Instituto Alajuela, señaló que están investigando lo ocurrido e indicó que, este viernes, tiene una reunión con la dirección regional del MEP para verificar los hechos.
“Todo lo manejamos bien dentro de las instalaciones; sin embargo, pedimos ayuda a los policías porque comenzaron a llegar los padres de familia muy asustados y nos bloquearon la salida. También se llamó a Cruz Roja para que atendieran los casos de ansiedad que había en algunas niñas. En este colegio tenemos 2.200 estudiantes y no es fácil manejar tanta población”, concluyó Barrantes.