POR Christian Montero | 4 de noviembre de 2017, 19:19 PM

En una extensa jornada para conocer las medidas cautelares contra los siete imputados por el caso del cemento chino, el juzgado dictó tres meses de prisión preventiva contra el empresario Juan Carlos Bolaños y los siete funcionarios del Banco de Costa Rica, entre ellos Mario Barrenechea, gerente general suspendido del banco estatal.

A través de Twitter el Ministerio Público escribió lo siguiente:

"Los imputados a quienes les dicten prisiones preventivas durante el fin de semana, ingresan al CAI San José los lunes, miércoles o viernes, a menos que los tribunales determinen una situación distinta. En este caso, el día más cercano será el lunes", informó el Ministerio de Justicia por medio de su oficina de prensa.

Desde la 1 de la mañana de este sábado se lleva a cabo la audiencia en los Tribunales de Justicia de San José, contra las siete personas detenidas este viernes en varios allanamientos en Atenas y San José.

La Fiscalía había solicitado seis meses de prisión preventiva contra los involucrados, sin embargo, minutos antes de las 7 de la noche de este sábado el juzgado les dictó tres meses.

Desde la detención de los siete imputados hasta el desarrollo de la audiencia de medidas cautelares, pasaron más de 30 horas.

La extensa jornada recayó tanto en funcionarios judiciales, como en los sospechosos y sus defensores.

Pasada la media noche de este sábado concluyó la indagatoria de los seis funcionarios del BCR y el empresario.

Juan Carlos Bolaños y el gerente suspendido del banco, Mario Barrenechea, fueron los primeros indagados.

Y a eso de la 1 de la madrugada inició la audiencia de medidas cautelares dirigida por la jueza Cecilia Carballo, del juzgado de turno extraordinario.

La defensa de Bolaños dijo en que la extensa jornada se pudo evitar, si la fiscalía hubiera aceptado los documentos y la declaración que ofreció el importador de cemento desde semanas atrás.

Los defensores de Bolaños manifestaron que su cliente declaró durante tres horas y que enfrenta un fuerte cuadro de estrés, ya que según afirman, fue amenazado por otros reos.

Los litigantes adelantaron que si fuera necesario apelarían las medidas cautelares relacionadas con este caso.