POR Eric Corrales | 24 de noviembre de 2024, 8:00 AM

Una vecina de Heredia no se rinde ante la adversidad: perdió su casa en un incendio en el que también murió su esposo, quedó sola con tres hijos pequeños, le diagnosticaron una discapacidad y, a pesar de todo, lucha día a día para tratar de sacar adelante a su familia.

Fue hace casi 10 años cuando la tragedia tocó la puerta de Elsa María Hernández Álvarez. Ella vivía en Puente Salas de Barva de Heredia y, junto a su esposo, tenía una vida como cualquier familia costarricense, trabajando duro para salir adelante. Jamás imaginaron que hacer un gesto de buena voluntad les cambiaría la vida para siempre.

Según relató a Teletica.com, ellos tenían una casa cómoda, sin lujos, pero vivían bien; en ese entonces, tenían un cuarto desocupado, por lo que decidieron darle alojamiento a una pareja cercana a la familia que no tenía donde vivir.

“Decidimos ayudarlos, pero con el tiempo comenzaron a tener problemas, él se volvió muy violento con ella, entonces ella lo terminó echando de la casa, él se fue, pero a los 12 días llegó y la agredió en mi presencia, yo salí gritando de la casa, los vecinos llegaron a ayudar, una ambulancia tuvo que atender a la muchacha, la Policía se llevó al muchacho detenido.

“Tuvimos que ir al hospital y al Juzgado para que ella presentara la denuncia, yo fui testigo del hecho. Resulta que él ya tenía un expediente de ser una persona violenta y agresiva y le dictaron tres meses de prisión preventiva”, contó Hernández.

Sin embargo, según relató, ni las medidas de protección que les ofrecieron ni la prisión preventiva se cumplió, y el 14 de marzo de 2015 ocurrió la desgracia.

“15 días después de que fuimos al Juzgado, él llegó por la noche a mi casa, la roció con gasolina y le prendió fuego.

“Se quemó toda la casa, mi esposo quedó atrapado en el fuego, cuando lo lograron sacar, como se ve en las imágenes que le envié, tenía quemaduras en un 90% de su cuerpo. Lo hospitalizaron por 15 días, pero él no resistió y murió. Fue un momento muy duro.

“Quedamos en la calle, sin nada y lo peor, sin mi esposo, tras de todo, yo me enfermé y me diagnosticaron una hernia en el disco de la columna, esta me prensó dos nervios que me empezaron a generar insuficiencia venosa en la pierna izquierda y quedé con una discapacidad para caminar, he estado muy mal de salud y por mi condición me cuesta trabajar, pero aun así a como he podido he tratado de trabajar, pero por tener esta condición no me dan empleo”, acotó la madre de familia.

Fotografía enviada por doña Elsa del momento en el que sacaron a su esposo, todavía con vida.

En el mismo incendio también resultó con quemaduras el agresor, quien murió 14 días después en la Unidad de Cuidados Intensivos.

Posteriormente, su hijo menor estuvo hospitalizado varios días y tuvo que renunciar a su trabajo para poder cuidarlo.

Casi 10 años después, Hernández continúa luchando para sacar adelante a sus dos hijos, de 12 y 13 años, y su hija de 15, quienes estudian en el Liceo de Heredia, Colegio Técnico Carlos Pascua Zúñiga y el menor en la escuela Bajo Los Molinos, quien este año se gradúa de sexto.

La casa donde vivían quedó reducida a cenizas.

A pesar de su discapacidad, doña Elsa cuenta que no se rinde, ha trabajado en todo lo que puede, desde limpiando casas hasta haciendo repostería.

“He pedido ayuda con dictámenes médicos al IMAS, al INAMU y a cuanta institución trato, pero no he tenido respuesta, ha sido muy duro. Yo recibo una pensión pequeña de mi esposo, pero no alcanza para los gastos mínimos.

“La mayor parte he trabajado limpiando casas y así hasta las ocasiones en las que he tenido trabajo en empresas, pero por mi discapacidad me han despedido al tiempo. Pero sigo intentando de todo.

“Mis hijos son lo único que me queda, ya no quiero que ellos vivan más tragedias y menos en estos momentos, en las fechas que vienen estar pensando dónde vamos a vivir, qué vamos a hacer y cómo vamos a hacer, es muy difícil para mí porque yo estoy como atada de manos. Yo no estaría viviendo nada de esto si la ley hubiera actuado como lo tenía que hacer. Nos arriesgaron a mi familia y a mí a vivir esta desgracia y hoy por hoy a seguir arrastrando las secuelas, pero no me rindo, siempre saco fuerzas de donde pueda”, finalizó.

Si usted desea ayudar a esta madre de familia, lo puede hacer a la cuenta bancaria: CR18015202001336156831, del Banco de Costa Rica, o al SINPE Móvil: 60318006, ambos a nombre de Elsa María Hernández Álvarez.

El incendio ocurrió el 14 de marzo de 2015.