Nacional
687 casos de COVID-19 en Costa Rica, seis más que ayer
En este momento, ocho pacientes requieren apoyo respiratorio en unidades de cuidado intensivo.
El Gobierno no tiene dinero para atender la solicitud de ayuda que la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) realizó para combatir una posible crisis financiera por motivo de la emergencia del COVID-19.
Tanto el Presidente Carlos Alvarado como el ministro de Hacienda, Rodrigo Chaves, confirmaron este jueves que el Estado no está en capacidad de pagar los ₡1.5 billones que adeuda a la institución de salud y que esta solicitó para tratar de estabilizar sus finanzas, seriamente afectadas por la pandemia del coronavirus.
“Ciertamente esos montos en este momento no son del alcance del Estado, para eso no hay plata para pagar, pero eso no significa que sea un rechazo, lo que se dice es que en esas dimensiones no, pero las voluntades para resolver esto están”, dijo el mandatario en conferencia de prensa.
Alvarado confirmó que el miércoles, luego de una reunión con la junta directiva de la Caja en la que también estuvieron los ministros de Hacienda y Planificación y el presidente del Banco Central, se acordó crear una comisión especial de trabajo para buscar soluciones que permitan atender las necesidades de la institución sin afectar las finanzas del país.
“Pueden tener la confianza los costarricenses de que estamos trabajando para resolver eso y encontrar ese balance. El Gobierno de la República jamás, menos hoy, dejará a la Caja sin los respaldos para cuidarnos como país, de eso pueden tener mi garantía como presidente”, expresó Alvarado, sin detallar eso sí ninguna de las alternativas que, dijo, se han presentado al respecto.
La posición del Presidente llega luego de que el directivo de la CCSS, Mario Devandas, diera a conocer en sus redes sociales la celebración de esa reunión y la negativa del Gobierno a pagar, negativa que, aseguró, amenaza a la institución con la quiebra.
Devandas insistió en que esa falta de recursos, agravada por la reducción en la base mínima contributiva solicitada por el Gobierno, la disminución de ingresos por cuotas obrero-patronales y el aumento en los gastos producto de la emergencia tiene a la Caja al borde del abismo y que esa situación amenaza con detener la construcción de los hospitales de Cartago, Puntarenas y Turrialba, así como las torres médicas del Calderón Guardia, Hospital México y Hospital de Niños.
“Mi respuesta a declaraciones recientes sobre la CCSS, es que el país no debe dedicar montos desproporcionados a una sola institución, sino que debemos ser justos y balanceados con todas las familias, las empresas y las instituciones.
“El Ministerio de Hacienda tiene el interés y la responsabilidad de apoyar el fortalecimiento de la CCSS. Sin embargo, los montos que se han mencionado en torno a este tema están fuera de las posibilidades reales del país y del marco de responsabilidad macroeconómica”, aseguró el ministro Chaves.
Soluciones
El presidente Alvarado confirmó que ya se pactó el traslado de ₡33.000 millones a la Caja, precisamente relacionados a atender esa solicitud de reducir la base mínima contributiva. Será incluido en un futuro presupuesto extraordinario.
El mandatario dijo que, mientras tanto, deberán seguir el camino del diálogo con la institución para intentar encontrar ese balance necesario entre las necesidades y obligaciones de las partes.
“No hay un escenario en que le demos el respaldo a la CCSS y el Estado pierda su solvencia y todos estemos bien. La capacidad de pago y los mecanismos de financiamiento es precisamente lo que hay que definir”, dijo Alvarado.
El Gobierno insistió ante la Junta Directiva de la CCSS que, aunque sabe de la afectación que está teniendo la institución, las finanzas del Estado también se han visto seriamente afectadas por la emergencia, especialmente en materia de recaudación, pues contra la mayoría de impuestos pesan moratorias.
La CCSS, mientras tanto, anunció este mismo jueves el acuerdo de solicitar una reunión con los jefes de fracción de los diferentes partidos políticos con el objetivo de presentarles las proyecciones del impacto financiero que la pandemia tendrá sobre las finanzas de los regímenes de salud y pensiones.
Precisamente, la sostenibilidad de la institución fue un tema álgido el miércoles en la sesión del Plenario legislativo, específicamente en medio de la discusión del presupuesto extraordinario que ayer recibió primer debate y que no incluyó ninguna partida para la Caja.
El frenteamplista José María Villalta propuso una moción para adicionar ₡30.000 millones destinados a ayudar a la institución en este momento de crisis, sin embargo, la iniciativa no consiguió el apoyo necesario.