POR Yessenia Alvarado | 30 de junio de 2017, 14:15 PM

A sus 74 años, una vecina de Parrita sueña con aprender a leer y escribir. Doña Luz Guzmán está cerca de cumplir este sueño.

La pobreza era una de las características que marcaban a nuestro país en 1943. Las familias eran numerosas, con muchos hijos. Aprender a leer y escribir no era algo común para todos.

Justo en ese año, fue cuando nació doña Flor Guzmán Cerdas, una vecina de Playón San Isidro en Parrita de Puntarenas.

Doña Luz no pudo ir a la escuela para aprender a leer y escribir, pero ese anhelo no ha salido nunca de su corazón, por eso, a sus 74 años, ella ya está en tercer grado, estudiando en la escuela nocturna.

Esta abuela y madre de 9 hijos añora leer la Biblia para compartir las enseñanzas a sus nietos. También quiere escribir el libro de su propia vida.

Doña Luz es la madre de Antonio Astúa Guzmán, uno de los finalistas de Motores de Vida.