POR Juan Carlos Zumbado | 23 de agosto de 2024, 18:55 PM

En las cercanías del Parque Nacional Volcán Rincón de la Vieja, en Curubandé de Liberia, se encuentra un refugio donde la naturaleza y la aventura convergen en perfecta armonía. Este lugar, que en el pasado fue una hacienda ganadera, se ha convertido en un destino de ensueño que ofrece a sus visitantes una experiencia inolvidable.

Un sueño familiar hecho realidad

Hace 36 años, la familia Batalla decidió transformar su negocio ganadero en un proyecto más ambicioso: el Hotel Hacienda Guachipelín, diseñado para aprovechar al máximo la belleza natural de la región (ver nota completa en el video adjunto).

Entre las actividades disponibles destacan el canopy, tubing, senderismo, ciclismo de montaña, paseos a caballo y la visita a siete impresionantes cataratas locales, siendo la Oropéndola una de las más emblemáticas.

La magia de la Oropéndola

De las siete cataratas que se pueden visitar desde el hotel, la Oropéndola es quizás la más impactante. Ubicada en el corazón del proyecto, esta cascada ofrece una experiencia sensorial única. Desde lo alto, se puede escuchar el rugido del agua al precipitarse hacia una poza turquesa, creando un espectáculo natural que deja sin aliento a quienes lo presencian.

Un destino a solo 45 minutos de Liberia

El hotel está estratégicamente ubicado a solo 45 minutos del centro de Liberia, lo que lo convierte en un destino accesible para quienes buscan escapar del bullicio de la ciudad y sumergirse en la serenidad de la naturaleza.

Para más información o para reservar una experiencia en este paraíso natural, puede contactarlos al teléfono 2690-2900, WhatsApp 8912-3477 o seguir sus redes sociales en Hotel Hacienda Guachipelín.

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