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‘Jeguí’: un baile ancestral que mantiene viva la cultura ngäbe en el sur de Costa Rica
A través de sus movimientos, se narran historias de la naturaleza, la vida y el cosmos.
En el pueblo de Islita, en Nandayure, todos conocen a Dominga Matarrita como “Mamá Dominga”. Orgullosamente guanacasteca, es la encargada de brindar a los turistas una experiencia única en la cocina del Museo de Punta Islita, donde comparte su conocimiento y pasión por la cocina tradicional costarricense.
Vecina de Bejuco, “Mamá Dominga” no solo prepara deliciosos desayunos para los visitantes, sino que también los guía en talleres donde aprenden a palmear tortillas y a cocinar recetas típicas con ingredientes frescos y locales. Su hospitalidad y calidez han convertido estos cursos en un punto de encuentro para turistas que desean conectarse con la cultura guanacasteca (ver nota completa en el video adjunto).
Pero su labor va más allá de la cocina. Ella también imparte talleres de arte utilizando elementos recolectados en el bosque y el mar. Su amor por la naturaleza y su creatividad son el corazón de estas actividades, que buscan enseñar a los visitantes a crear con lo que la tierra ofrece.
Colaboradora del Hotel Punta Islita, al que considera su segundo hogar, “Mamá Dominga” es una de las personas que mejor representa la hospitalidad y el espíritu de Guanacaste. Bajo su guía, los turistas no solo aprenden nuevas habilidades, sino que también se llevan un pedacito del alma guanacasteca.
Lo invitamos a visitar Nandayure, recorrer sus encantadores distritos, disfrutar de sus hermosas playas y experimentar el frescor de sus montañas. Conozca a Dominga y viva una auténtica experiencia guanacasteca.
Para más información, puede contactar con el Hotel Punta Islita y preguntar por los talleres.