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La granja del tío Charlie: diversión familiar en las montañas de Alajuela
La granja, parte de la Organización Comunidad Cristiana Shalom, tiene un enfoque social.
En medio del ajetreo de la capital costarricense, existe un lugar que ha capturado la atención de peatones y curiosos por igual: la acera sin fin. Este peculiar trayecto urbano, ubicado en San José, se ha vuelto todo un fenómeno gracias a su diseño extenso y continuo que parece no tener un final.
La razón detrás de su nombre es sencilla, pero fascinante: permite recorrer, sin cruzar calles ni una sola vez, el camino desde la esquina de la antigua Fábrica Nacional de Licores hasta la esquina del Tribunal Supremo de Elecciones (TSE); un recorrido aparentemente infinito, porque se puede caminar de un lado a otro cuantas veces se desee.
Aunque está rodeada por el bullicio típico de la ciudad, caminar por esta acera tiene algo especial. Su singular extensión y su curioso diseño generan la sensación de un camino interminable, lo que ha llevado a muchos a detenerse, explorarla y, por supuesto, fotografiarla.
En el video adjunto le contamos cómo puede vivir esta experiencia.