POR Johnny López | 12 de junio de 2024, 18:55 PM

En San Isidro de Heredia el legado de la tradición de la carreta y los bueyes ha perdurado a lo largo de los años gracias a la familia Fonseca. 

Encabezados por Benedicto Fonseca, un boyero de 82 años de edad, la familia ha cultivado este oficio, transmitiendo su pasión y conocimientos de generación en generación.
 
Benedicto recuerda con cariño sus primeros días como boyero (repase la nota completa en el video adjunto). 

"Yo empecé siendo un niño, viendo a mi papá enyugando los bueyes para ir a trabajar al trapiche. Antes era un trabajo muy duro porque muchos de los caminos eran barreales", compartió con nostalgia.

La historia de los Fonseca es una de dedicación y amor por una tradición que se remonta varias generaciones: desde el abuelo hasta el bisnieto, hoy en día son cuatro generaciones de boyeros los que mantienen viva esta pasión. 

Sin embargo, algunos aseguran que la tradición se extiende aún más, abarcando hasta siete generaciones dentro de la familia de Benedicto, desde el bisabuelo hasta el patriarca actual.
 
Uno de los principales herederos de esta tradición es Carlos Fonseca, hijo de Benedicto, quien a sus 52 años sigue los pasos de su padre con orgullo. 

"En la actualidad seguimos aprendiendo de mi papá. Depende de cómo amarramos la carreta él nos corrige, todos los días tenemos la oportunidad de compartir y aprender. Conmigo, mi hija y nieto han seguido la tradición", expresó Carlos con entusiasmo.

La tradición de los boyeros no solo es un legado familiar para los Fonseca, sino también una parte importante de la identidad cultural de San Isidro de Heredia.

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