Dejaron vivo a Saprissa y se convirtió en amenaza

"Cuando Saprissa no está bien, hay que noquearlo, hay que matarlo, no lo pueden dejar vivo. Si estábamos mal, tenían que darnos el golpe", comentó el técnico Jeaustin Campos el miércoles anterior. Tan solo tres días después, el tiempo le da la razón: el Monstruo ya está en zona de clasificación y amenaza con clasificar.

Los morados golearon 3-0 a Jicaral en la Cueva en lo que fue una puesta en escena con un mensaje claro: quieren meterse a la fiesta grande.

En zona de clasificación por sanción.

La S dormirá en el cuarto puesto, empatado con San Carlos con 28 puntos. Los norteños se medirán este domingo a Cartaginés. 

Sin embargo, sobre los sancarleños pesa una sanción por haber perdido puntos en la mesa contra Alajuelense al haber cometido una alineación indebida, por lo que en caso de estar empatado en puntos con cualquier club, los norteños estarán una casilla por abajo. 

Jeaustin es la clave.

El técnico Campos continúa siendo el principal protagonista de un equipo al que fecha a fecha hay que hacerle remiendos por expulsiones o lesiones. 

El triunfo se labró de manera temprano. A los 10 minutos, Ariel Rodríguez aprovechó un centro rastrero de Ryan Bolaños.

Siete minutos después, David Guzmán finalizó de cabeza un gran contragolpe del Monstruo.

El equipo lució con soltura en el campo, una confianza que se la daban los tres triunfos al hilo con los que llegaban a La Cueva. 

Mariano Torres sigue siendo un punto alto, es el que se encarga de administrar el balón, mientras que hay que destacar que el inconstante Jimmy Marín continúa haciendo puntos para verse mejor en el cierre del torneo. Esta noche aportó una asistencia en el tanto de Guzmán.

El propio Mariano se encargó de ponerle al juego tintes de goleada al 66' con un gol de buena factura de pierna izquierda.

La criticada zaga del equipo conoció el orden con Campos. Gerald Taylor, Aubrey David, Kevin Espinoza y Ryan Bolaños conformaron el esquema defensivo, acompañados por Jaylon Hadden, quien en ocasiones funciona como un central más y en otras como un volante de contención.