Internacional
Reñidas elecciones en Panamá marcadas por obras de gobierno y corrupción
Panamá celebrará elecciones generales en un mes en un proceso mediatizado por las obras de gobierno y denuncias de corrupción...
Panamá celebrará elecciones generales en un mes en un proceso mediatizado por las obras de gobierno y denuncias de corrupción, y con candidatos pro estadounidenses que se encuentran en una lucha reñida por la preferencia de los votantes.
"Estas van a ser una de las elecciones presidenciales más reñidas de la historia de Panamá. Quien cometa un error en este mes, pierde las elecciones", aseguró a la AFP el analista político José Blandón.
El próximo 4 de mayo, más de 2,4 millones de panameños están llamados a las urnas para elegir nuevo presidente entre siete candidatos, renovar el Congreso y las alcaldías.
El oficialista José Domingo Arias, un empresario del sector textil y exministro de Vivienda del actual mandatario Ricardo Martinelli, encabeza la mayoría de encuestas, seguido del opositor socialdemócrata y exalcalde capitalino (1999-2009) Juan Carlos Navarro.
Sin embargo, Arias ha dilapidado los diez puntos de ventaja que llegó a tener sobre Navarro en las encuestas de intención de voto, que actualmente dan un empate técnico entre ambos.
En un cercano tercer lugar aparece Juan Carlos Varela, con la curiosa condición de ser el actual vicepresidente del gobierno y a la vez opositor, desde que el presidente Martinelli lo destituyera de su cargo de canciller en 2011.
Varela, un empresario del licor, dirige el Partido Panameñista (derecha) y aspira a la Presidencia en coalición con el demócrata cristiano Partido Popular.
- Resultado ajustado –
Para añadir más incertidumbre, los analistas aseguran que Arias puede verse beneficiado por las obras del gobierno de Martinelli, pero el Partido Revolucionario Democrático (PRD) de Navarro es el que más aceptación y organización tiene, mientras que Varela es el político mejor valorado pese a ir en tercer lugar.
"Me da la impresión hasta el momento que el resultado va a ser muy ajustado entre los tres candidatos", dijo a la AFP el analista Edwin Cabrera.
El oficialismo hace hincapié en el crecimiento económico, uno de los más altos de la región con 7%, los programas sociales y las obras del gobierno, que ha invertido más de 15.000 millones en infraestructura, entre ellas el primer metro de Centroamérica, que se inaugurará el sábado.
La oposición contraataca asegurando que Arias -cuya compañera de fórmula es la esposa del presidente, Marta Linares- es un "títere" de Martinelli, quien está buscando una reelección encubierta.
Incluso, los opositores fustigan las obras asegurando que hay cuantiosos sobrecostos y acusan al gobierno de corrupción.
"Esta igualdad lo que puede provocar es la desesperación de los candidatos y el aumento de las campañas sucias", vaticinó Cabrera.
Los aspirantes centran sus mensajes en la inflación, la inseguridad, el transporte, la educación y la ayuda al productor, en una campaña electoral carente de discursos y debates ideológicos, pese a que más de la mitad de los electores está inscrito en partidos políticos.
- Ideologías ausentes -
"En la lucha electoral en Panamá no hay diferencia ideológica alguna, en ninguno de los principales candidatos, que son proamericanos, hay en absoluto ninguna propuesta para un cambio sustancial en el modelo económico, político o social", comentó Blandón.
"La campaña aquí es como una especie de subasta donde todo el mundo ofrece. En Panamá las definiciones ideológicas son como cajetas vacías y las preocupaciones son otras, por eso la lucha ideológica aquí no cuenta", dijo a la AFP el analista Jaime Porcell.
Los analistas coinciden además en que los candidatos, salvo alguna rara excepción, están alineados a las tesis de Washington.
Los cuarteles de campaña de Arias y Navarro se han acusado mutuamente de estar apoyados por el presidente venezolano, Nicolás Maduro, quien rompió relaciones con Panamá al considerar a su gobierno un "títere" de Estados Unidos.
"Todavía aquí los panameños, quizás por un hábito mental, estamos pendientes de Estados Unidos y de mantener unas relaciones estrechas con ellos, aunque la influencia ahora es de cuenta gotas, de sutilezas y no tanto de fuerza como antes", manifestó Porcell.
Estas serán las quintas elecciones en Panamá desde la caída del régimen militar encabezado por Manuel Antonio Noriega, derrocado tras una cruenta invasión militar de Estados Unidos en diciembre de 1989.