POR Agencia EFE | 20 de mayo de 2014, 8:36 AM

Managua, 20 may (EFE).- Una organización no gubernamental nicaragüense dedicada a la protección de los animales demandó hoy a las autoridades acusar y condenar a los responsables de la matanza de perros con flechas ocurrida el mes pasado en una zona exclusiva del sur de Managua.

"Esperamos que ya la Policía Nacional haya identificado a los culpables, que la Fiscalía los acuse y los tribunales de justicia les imponga una dura condena", dijo a Efe el presidente de la Fundación Amarte, Enrique Rimbaud.

De acuerdo con Rimbaud, la Policía Nacional allanó anoche algunas viviendas y detuvo a seis sospechosos, incluido un menor de edad, y decomisó cuatros ballestas, dos arcos y varias flechas de diferentes tamaños con las que supone mataron a por lo menos seis perros.

La Policía nicaragüense aún no ha dado a conocer los nombres de los detenidos, que estarían bajo investigación.

Días atrás, la Policía decomisó en la residencia del juez tercero local civil de Managua, Silvio Aguilera -quien es investigado y ha negado los hechos-, tres ballestas con flechas, un rifle, más de 200 municiones, así como dos espadas y sus accesorios, de acuerdo con un expediente policial.

De acuerdo con la legislación nicaragüense, la pena máxima por este delito es de 3.000 días, multas que se calculan según los ingresos del inculpado.

El caso ha captado la atención en Nicaragua por cuatro razones: los perros aparecían atravesados con flechas costosas, los ataques habían ocurrido en la noche, todos los animales estaban dentro de sus casas al momento de ser atacados, y en la zona habitan familias adineradas, políticos y altos funcionaros del Gobierno.

La Fundación Amarte, que protege animales, advirtió que muchos asesinos tienen antecedentes de maltratadores, y organizó una marcha para repudiar la matanza y demandar a las autoridades aplicar la Ley de Protección y Bienestar Animal, que sanciona su muerte injustificada.

Según Rimbaud, los responsables de la matanza no sólo cometieron el delito de maltrato animal, sino también de exposición de personas al peligro, allanamiento de morada y asociación para delinquir, entre otros.

A principios de mayo pasado, la Policía emitió una resolución que obliga a los dueños de ballestas a reportar su posesión, ya que a partir de este año dichas armas serán tratadas como las armas blancas o las de fuego.