Internacional
Obama cancela parte de su gira por Asia por el cierre de la Administración federal
Obama mantendrá las paradas programadas en Indonesia y Brunei, pero no viajará después a Malasia y Filipinas, los otros dos países que tenía previsto visitar.
Washington, 2 oct (EFE).- El presidente de EEUU, Barack Obama, ha cancelado parte de la gira por Asia que realizará a partir de este sábado debido a la crisis por el cierre parcial de la Administración federal por falta de fondos, según informó hoy la Casa Blanca.
Obama mantendrá las paradas programadas en Indonesia y Brunei, pero no viajará después a Malasia y Filipinas, los otros dos países que tenía previsto visitar.
El secretario de Estado de EEUU, John Kerry, sustituirá a Obama y visitará Malasia y Filipinas en su lugar, detalló la Casa Blanca.
Obama habló anoche por teléfono con el primer ministro malasio, Najib Razak, y con el presidente filipino, Benigno Aquino, para informar a ambos de la cancelación de su viaje.
Lo que se mantiene por ahora es la visita de Obama a Indonesia, donde participará en la cumbre del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC, en inglés), que reunirá en Bali a los líderes de los 21 países que integran ese bloque.
Al margen de ese encuentro, Obama presidirá una reunión de los países que integran el Acuerdo de Asociación Transpacífico (TPP, en inglés) y será recibido por su homólogo indonesio, Susilo Bambang Yudhoyono.
Posteriormente Obama viajará a Brunei, donde sostendrá un encuentro bilateral con el sultán Hasanal Bolkiah y participará en las cumbres de EEUU y la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN), y la del Este Asiático (EAS).
Desde ayer martes están parcialmente paralizadas las actividades de la Administración federal en EEUU a causa de la falta de acuerdo en el Congreso para aprobar fondos para financiar al Gobierno en el nuevo año fiscal.
El ala más conservadora de los republicanos, fundamentalmente el movimiento Tea Party, busca condicionar esa financiación a retrasos en la aplicación de la reforma sanitaria, algo que rechazan los demócratas y el propio Obama.