POR Agencia EFE | 23 de junio de 2014, 6:31 AM

Damasco, 23 jun (EFE).- El último cargamento de armas químicas declaradas por el régimen de Bachar al Asad salió hoy del territorio sirio para su destrucción en el extranjero, en cumplimiento del acuerdo internacional para desmantelar ese arsenal.

Una fuente del Ministerio sirio de Asuntos Exteriores afirmó que su país ha completado su "compromiso humanitario pese a las difíciles condiciones de seguridad y los desafíos que presentan los ataques terroristas contra la nación siria y su pueblo".

Según la fuente, este logro supone una nueva prueba de que el Ejecutivo de Damasco responde a sus obligaciones internacionales de forma "seria y responsable".

Además, manifestó su esperanza de que este "éxito" de Siria y de la misión conjunta de la ONU y la Organización para la Prohibición de Armas Químicas (OPAQ) abra la puerta para pedir a la comunidad internacional que exija a Israel que se una a los tratados contra la proliferación de armas de destrucción masiva.

En un comunicado, la directora del equipo de la ONU y la OPAQ, Sigrid Kaag, confirmó la salida de la última tanda de armas químicas, que suponía el 7,2 por ciento del total declarado por las autoridades sirias.

Kaag recordó que el Gobierno sirio ha destruido también todos sus equipos para producir este tipo de armas, así como muchos edificios vinculados a su programa químico.

"A excepción de doce instalaciones de producción que están esperando una decisión del Consejo Ejecutivo de la OPAQ, todo lo declarado en el programa de armas químicas sirias ha sido eliminado en un calendario sin precedentes y bajo unas condiciones desafiantes únicas", indicó.

Kaag agradeció la "cooperación constructiva" de las autoridades sirias a lo largo de este proceso y de los países que han respaldado y han aportado recursos para eliminar las armas químicas.

El director general de la OPAQ, Ahmet Üzümcü, explicó en un comunicado que las últimas sustancias químicas partieron esta tarde del puerto de Latakia, en la costa mediterránea siria, a bordo del barco danés Ark Futura.

El trabajo de la misión internacional se centrará ahora en llevar a cabo las operaciones marítimas necesarias para entregar los productos químicos y destruirlos en el buque estadounidense Cape Ray y en instalaciones especiales de Finlandia, Alemania, el Reino Unido y EEUU.

El equipo de expertos internacionales se desplegó en Siria tras el pacto alcanzado en septiembre pasado entre Washington y Moscú, que evitó una intervención militar estadounidense en Siria, tras un bombardeo con armas químicas en agosto en un suburbio de Damasco, del que Washington responsabilizó al régimen de Al Asad.

La ONU fijó el 30 de junio como fecha máxima para la destrucción del arsenal químico, aunque en los últimos meses había expresado sus dudas de que este plazo se cumpliera por los retrasos en la salida de las sustancias del país árabe.

Para Üzümcü,"nunca antes todo un arsenal de esta categoría de armas de destrucción masiva ha sido eliminado de un país que atraviesa un conflicto armado interno. Y esto se ha logrado en plazos muy exigentes y estrictos".

Aun así, adelantó que su organismo continuará trabajando en suelo sirio tras el "cierre de este gran capítulo".

"Esperamos concluir pronto la aclaración de ciertos aspectos de la declaración (de armamento químico) de Siria e iniciar la destrucción de ciertas estructuras que fueron utilizadas como instalaciones de producción de armas químicas", señaló.

Pese a estos avances, algunos países occidentales como Francia y EEUU han expresado sus dudas sobre las buenas intenciones del régimen de Bachar al Asad ante las denuncias de la oposición y activistas sobre supuestos ataques químicos recientes.

La semana pasada, la misión conjunta reveló que consideraba "creíble" el uso de productos químicos tóxicos, como el cloro.

Así lo revelaron los inspectores en un informe sobre presuntos ataques con gas cloro por parte de las autoridades sirias, del que Üzümcü informó la semana pasada al Consejo Ejecutivo de la OPAQ.

"La información que estaba disponible para la misión de investigación otorga credibilidad al criterio de que se emplearon productos químicos tóxicos -lo más probable agentes que irritan los pulmones, tales como cloro- en Siria", señaló la OPAQ.