Internacional
Investigadores hallan en Portugal "elementos" que podrían vincularse con caso Maddie
Christian B., pederasta reincidente, es desde 2020 el principal sospechoso del caso y cumple una pena de siete años de cárcel en Alemania por la violación de una estadounidense de 72 años.
Los investigadores encontraron algunos "elementos" durante las búsquedas iniciadas en mayo sobre la desaparición en 2007 de la niña británica McCann en Portugal, pero aún se desconoce si están vinculados con el caso, informó la fiscalía alemana de Brunswick este jueves.
"Algunos elementos fueron incautados en el marco de esta operación. Estos serán analizados en los próximos días y semanas", afirmó la fiscalía en un comunicado, añadiendo que era "todavía demasiado pronto" para determinar si estaban relacionados con el caso.
"Maddie" McCann desapareció poco antes de cumplir cuatro años el 3 de mayo de 2007 en un balneario en Praia da Luz, en el Algarve, en el sur de Portugal, donde estaba de vacaciones con su familia.
Su desaparición dio lugar a una excepcional campaña en la que las fotos de la pequeña, de ojos claros y pelo castaño, dieron la vuelta al mundo.
La investigación estuvo estancada durante años antes de que las autoridades se fijaran en el alemán Christian B., un hombre que vivía en esa época a unos kilómetros del hotel.
"La investigación sobre el sospechoso de 46 años de Brunswick continuará probablemente durante mucho tiempo", advirtió la fiscalía.
Las autoridades portuguesas iniciaron a finales de mayo nuevas búsquedas cerca de un embalse en Silves, una localidad del Algarve, tras una solicitud de Alemania.
Según los medios portugueses, los investigadores recogieron muestras del suelo durante las búsquedas, así como varios trozos de tela encontrados en el lugar.
La policía ya había peinado la zona en 2008, situada a unos 50 km del lugar donde desapareció "Maddie", pero los submarinistas solo encontraron restos animales en el embalse.
Christian B., pederasta reincidente, es desde 2020 el principal sospechoso del caso y cumple una pena de siete años de cárcel en Alemania por la violación de una estadounidense de 72 años.
Los medios locales señalaron que el sospechoso solía acudir a ese lugar, que habría descrito como su "pequeño paraíso".