POR Mariana Valladares | 23 de julio de 2024, 9:00 AM

Guanacaste es conocido no solo por sus impresionantes paisajes y playas, también por su rica herencia cultural y musical. Los instrumentos musicales guanacastecos, reflejo de la identidad y el alma de su gente, juegan un papel fundamental en la preservación de las tradiciones locales.

La marimba, símbolo nacional, es considerada como el alma de la música guanacasteca, aunque no es el único instrumento originario de esta provincia. En el marco del Bicentenario de la Anexión del Partido de Nicoya, Teletica.com conversó con músicos guanacastecos especialistas en el legado musical de la región para indagar sobre esos instrumentos que han sido olvidados u opacados por el prestigio de la marimba

Razziel Acevedo, catedrático e investigador de la Universidad de Costa Rica (UCR) en la sede de Guanacaste, y Eduardo Villafuerte Jirón, docente de marimba de la UCR y profesor del Ministerio de Educación Pública (MEP) de música destacaron varios instrumentos de los que se tiene poco registro fotográfico, entre ellos las ocarinas y el jugue.

Ocarinas guanacastecas. 

Otros instrumentos característicos de la provincia son los tambores, la guitarra, la carraca y el quijongo.

"Hay otros instrumentos además de la marimba, como la carraca o quijada de burro, ocarinas, los bombos, el quijongo.

"El quijongo es muy conocido, yo diría que es de los más populares, luego de la marimba. Es un tipo de tronco largo que lleva una cuerda y conforme se frota esta cuerda, sube, baja y produce un sonido muy característico", explicó Villafuerte.

Carraca o quijada de burro. ​

La melodía del quijongo es completamente autóctona. Según una investigación del Ministerio de Cultura y Juventud (MCJ) el quijongo guanacasteco tiene dos posibles orígenes: una influencia africana debido a la llegada de personas esclavizadas durante las primeras conquistas del país o por personas indígenas de Costa Rica.

“Este instrumento es muestra del intercambio cultural que ha habido desde hace siglos en la provincia de Guanacaste. Si bien es cierto se cree que los conocimientos para construir estos instrumentos llegaron de África, la tradición es costarricense porque contempla la forma de construirlo y la selección de los materiales oriundos de Guanacaste, su repertorio tradicional, así como el significado y el papel que tiene en nuestra cultura; todo eso surgió en nuestro país y es lo que lo hace propio”, indicó Adriana Méndez, antropóloga e investigadora del MCJ oriunda de Bagaces.

En la primera imagen se observa al músico guanacasteco Cristóbal Alvarado Quirós con un quijongo. En la segunda fotografía se ve un quijongo eléctrico de Werner Korte. 

"Tenemos también la carraca o quijada de burro, que es un instrumento que se ha tocado siempre. Se parece a una maraca, suena similar, pero hay que golpearla con los dientes flojos. El quije desapareció, que era un tambor con una cinta de hule y una varilla que se introducía y se sacaba y se producía un sonido muy grave. Las ocarinas desaparecieron, nadie sabe cómo funcionaban las ocarinas. Los tambores, los gueguel", resaltó Acevedo.

El catedrático de la UCR subrayó que la falta de materiales y la popularidad de la marimba desplazaron estos instrumentos.

"Hay mucho gusto por las marimbas, hay instrumentos menos sonoros, más difíciles de tocar, más difíciles de amar, no son tan accesibles. Imagínese usted solita con una marimba alegra, una fiesta, con otros instrumentos no. Eso hace que se vaya perdiendo el interés por el instrumento", finalizó


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