POR Deutsche Welle | 11 de junio de 2024, 17:40 PM

Deutsche Welle: Señor Zimmermann, en la noche pasada el Consejo de Seguridad de la ONU votó a favor de un plan de paz en tres etapas para Gaza. Primero debería haber un alto el fuego, durante el cual tendría lugar un intercambio inicial de rehenes israelíes y prisioneros palestinos. Tras ello, debería seguir un cese permanente de todos los combates, con la liberación de todos los rehenes restantes y, finalmente, una solución de paz duradera con la reconstrucción de Gaza. ¿Es esta resolución un avance para zanjar el conflicto?

Moshe Zimmermann: Es un paso en esa dirección. Se logrará un gran avance cuando ambas partes estén de acuerdo, tanto Hamás como el Gobierno israelí. El Gobierno israelí está celebrando ahora la fiesta judía de Shavuot. Después se podrá comprobar si se trata de un gran avance o, al menos, de un paso en la dirección correcta.

¿Cuáles son, en su opinión, las mayores dificultades para implementar ese plan?

La mayor dificultad es que ambas partes persiguen objetivos muy diferentes. Hamás trata de llevar a la guerra a su fin, es decir, de quebrar la superioridad militar de Israel, e Israel está intentando destruir a Hamás. Con este alto el fuego, Israel definitivamente no logrará sus objetivos, pero Hamás sí. Y esa es la dificultad en este momento.

"Los objetivos de guerra fueron un error”

Desde el ataque terrorista perpetrado por Hamás contra Israel, el 7 de octubre de 2023, ya pasaron más de ocho meses. El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, todavía no logró ninguno de los objetivos que se propuso. Ni Hamás ha sido derrotado, ni se ha liberado a todos los rehenes. ¿Fracasó la política actual de Israel?

Desde el comienzo, fue un error perseguir el objetivo de una derrota absoluta de Hamás, o lo que Netanyahu llamó una "victoria absoluta”. Eso era una ilusión, no fue el objetivo correcto luego de la gran debacle del 7 de octubre. Por eso, la guerra también se ha prolongado, porque no es posible alcanzar ese objetivo.

¿Quién podría ahora garantizar la implementación de este plan de paz? ¿Quién sería adecuado para actuar ahora como potencia protectora?

El papel principal lo desempeñan los Estados Unidos, de eso no hay duda, y sus aliados en Oriente Medio, como Arabia Saudita, Egipto y Jordania. Por supuesto, los palestinos ahora también deben ofrecer una alternativa a Hamás. Deben reformar y fortalecer la Autoridad Palestina. Si todo eso funciona, entonces el alto el fuego puede convertirse en un alto el fuego más prolongado.

No hay plan de posguerra para Gaza

Sin embargo, todavía no hay una declaración oficial sobre lo que sucederá en Gaza después del fin de la guerra. Por eso el líder de la oposición, Benny Gantz, abandonó el gobierno de unidad en medio de la disputa. ¿Cómo podría verse realmente un orden de posguerra?

Sabemos cómo sería eso si estuvieran interesados, es decir, que la Autoridad Palestina tomara el control de Gaza en lugar de Hamás, de modo que los palestinos de ambos lados -en Gaza y en Cisjordania- hablaran con una sola voz. En realidad, esa sería la solución más inteligente, pero es algo con lo que Netanyahu definitivamente no está de acuerdo.

Por eso todavía no se han hecho esfuerzos en esa dirección. Por eso la guerra dura tanto. Por eso no hay un plan claro para el día después. Y esa fue, en última instancia, la razón por la que Benny Gantz tuvo que dimitir del gobierno. Si todo esto fracasa, él no podrá lograr nada, y entonces sería mejor que estuviera en la oposición.

También se alzan voces del ala de la derecha que exigen poner fin al conflicto y que Gaza sea ocupada por colonos israelíes. ¿Se trata solo de un pequeño grupo, o es realmente un movimiento que se debe tomar en serio?

Hay muchas consideraciones, de todos lados. El problema es el Gobierno, que es de extrema derecha. Hay quienes en este Gobierno afirman que Gaza debe ser reocupada y que se deben construir allí nuevos asentamientos judíos. No sabemos si Netanyahu quiere llegar tan lejos, pero los socios de la coalición están bloqueando cualquier otra alternativa.

Y las otras consideraciones que presenté antes siguen siendo las consideraciones de la oposición. Estas no han tenido ningún efecto ni influencia hasta ahora, y esa es la razón por la que la parte israelí continúa librando la guerra. Si no se ofrece una solución inteligente, se sigue luchando. Y como Hamás no puede ser completamente destruido y Gaza no puede ser completamente bombardeada, tenemos esta guerra de desgaste que aún continúa.

Ocho meses es mucho tiempo, seguramente para Israel. Pero esto podría llevar más tiempo, a menos que el Gobierno tome una nueva decisión.

¿Cree que Israel aprobará el plan?

Supongo que habrá algunos contratiempos, como siempre, pero al final, tengo la esperanza de que la presión estadounidense será lo suficientemente eficaz como para que finalmente se produzca un alto el fuego basado en la decisión del Consejo de Seguridad de la ONU.

¿Es posible la reconciliación?

Señor Zimmermann, el 7 de octubre de 2023 dejó a la sociedad israelí gravemente traumatizada, pero después de meses de un conflicto militar de lo más severo, con decenas de miles de muertos, esto también se aplica a los palestinos. ¿Cómo pueden realmente los dos pueblos volver a estar juntos, cómo puede restablecerse algún tipo de confianza después de esta escalada?

Soy un historiador especializado en la historia europea. Conozco la Primera Guerra Mundial, conozco la Segunda Guerra Mundial. En ellas hubo más muertes, más destrucción. Si la intención y la voluntad existen, todo eso se puede superar, dejarlo atrás para buscar la paz. Es una cuestión de voluntad política.

Esto también se puede lograr en Oriente Medio, en mi opinión, incluso más que en Europa. Europa lo logró después de dos guerras mundiales. Nosotros también podemos hacerlo, siempre que ambas partes reconsideren cuál es su objetivo. Si ambos se centran únicamente en la destrucción de la otra parte, entonces ni siquiera un alto el fuego creará el comienzo de la paz.

El historiador israelí Moshe Zimmermann es profesor emérito de Historia Moderna en la Universidad Hebrea de Jerusalén, donde fue director del Centro Richard Koebner de Historia Alemana de 1986 a 2012. Durante varios años fue profesor visitante en Alemania.

(cp/ms)