Para quienes no lo sepan, Kylie Jenner es la menor de las hermanas Kardashian y ha hecho una fortuna no solo por pertenecer a esa mediática familia, sino además porque es dueña de una empresa que vende cosméticos veganos. Pues bien, todo muy noble y eco-friendly. El problema es que tiene un jet privado y lo usa para cubrir trayectos cortísimos, contaminando y desatando la ira de quienes ven un doble estándar en esta actitud.
La última lluvia de ira la recibió tras publicar el domingo una fotografía junto a su novio, Travis Scott, preguntándose si viajaban en el jet de ella o en el de él. La imagen acumula más de 8.200.000 likes en Instagram, pero también cientos de respuestas de quienes la critican por frivolidad y desinterés por el medio ambiente. Un usuario llega a escribir que "es por esto que hay que cobrarles más impuestos a los ricos”.
"La falta de consideración es asombrosa”, dice una usuaria, mientras otro dice "justamente para esto estoy reciclando”.
Fue entonces cuando se viralizó un tuit de Celebrity Jets, un bot de Twitter que informa del uso de jets privados por parte de estrellas de la farándula y el espectáculo. Allí nos enteramos que finalmente decidieron volar en el jet de Kylie (el día anterior lo hicieron en el de Travis), para cubrir la ruta entre Van Nuys y Camarillo, dentro de California. Un tramo que en automóvil toma 40 minutos y que ellos hicieron en 12 minutos en avión, de los cuales tres fueron volando (los otros nueve se fueron en faenas de despegue y aterrizaje).
En los días posteriores, Travis Scott realizó una serie de vuelos a Eugene y Los Angeles.
Steven Spielberg es otro famoso que realiza sus movimientos mayoritariamente en su jet privado, al igual que Jay Z, Mark Wahlberg o Taylor Swift. El problema con estos aviones es que contaminan diez veces más que los comerciales, y ni hablar que los trenes (50 veces más). Según un informe de Transport&Environment citado por el diario El País, las emisiones de un jet privado en 4 horas de vuelo equivalen a lo que genera una persona normal en 12 meses.
El sitio web de la radio británica Capital destaca que, al menos, esta polémica ha servido para abrir un interesante debate en las redes sobre el cambio climático y la responsabilidad de todos a la hora de luchar contra él.
En tanto, el programador de Celebrity Jets es Jack Sweeney, el mismo que monitorea los movimientos de los aviones de Elon Musk. Si no fuera por él, nunca nos habríamos enterado de que Kim Kardashian, hermana mayor de Kylie, hace una semana usó su jet durante 15 minutos, gastando 442 litros de combustible y emitiendo una tonelada de dióxido de carbono.