POR | 8 de agosto de 2017, 7:30 AM
AFP
Testigos afirman que las fuerzas de seguridad de Venezuela disparan perdigones a corta distancia contra los manifestantes.

La Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos responsabiliza a Venezuela de "uso de la fuerza extendido y sistemático" contra manifestantes en el marco de la actual crisis que vive el país.

El organismo presentó un informe en el que también habla de otras violaciones a los derechos humanos, incluidos "torturas, detenciones arbitrarias, maltrato y redadas violentas en hogares".

El informe preliminar recabó los datos con 135 entrevistas a testigos realizadas a distancia (desde Ginebra y Panamá) ante la negativa del gobierno del presidente Nicolás Maduro de darles acceso al país.

En éste se afirma que las fuerzas de seguridad son supuestamente responsables de al menos 46 muertes ocurridas en hechos violentos vinculados a las protestas.

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"Fuerza letal"

Según la ONU, desde que las protestas comenzaron en abril, el gobierno ha aplicado "un patrón evidente" de uso excesivo de la fuerza contra los manifestantes de la oposición.

El documento señala a la Guardia Nacional Bolivariana, la Policía Nacional y los cuerpos de policía locales.

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El informe señala a la Guardia Nacional Bolivariana, la Policía Nacional y los cuerpos de policía locales.

"Desde que comenzó la ola de manifestaciones en abril ha habido un claro patrón de uso excesivo de la fuerza contra los manifestantes", denunció en un comunicado el comisionado para los Derechos Humanos, Zeid Ra'ad Al Hussein.

"Varios miles de personas han sido detenidas arbitrariamente,muchas de ellas han sido víctimas de malos tratos e incluso de torturas. Y no hay indicios de que esa actuación vaya a cesar", agregó.

"La responsabilidad de las violaciones de derechos humanos que estamos registrando corresponde a los más altos niveles del Gobierno", opinó.

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"Sin advertencia"

Los entrevistados, que se dijo incluyeron víctimas, médicos, abogados, periodistas y paramédicos, relataron a la ONU que las fuerzas de seguridad disparan gases lacrimógenos y perdigones a corta distancia y sin advertencia.

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Las manifestaciones contra el gobierno de Nicolás Maduro comenzaron en abril y han provocado más de 120 muertes.

"Se informó que las fuerzas de seguridad también han recurrido al uso de fuerza letal contra manifestantes" dice la declaración del Alto Comisionado.

Y dijo que "algunos grupos de manifestantes también han recurrido a la violencia, con ataques contra los oficiales de seguridad".

El equipo de la ONU asegura que se calcula que más de 5.000 personas han sido detenidas arbitrariamente entre el 1 de abril y el 31 de julio.

El alto comisionado urge a las autoridades de Venezuela "a poner fin de inmediato al uso excesivo de la fuerza contra los manifestantes, a detener las detenciones arbitrarias y liberar a los que han sido arbitrariamente detenidos".