La vida real tiene los mejores guiones

La actriz ganadora del Óscar, Hilary Swank, tuvo una razón muy poderosa para interesarse por su papel de Sharon en la película Ángeles inesperados.

Su padre enfrentó una situación que lo puso entre la vida y la muerte al requerir de un donante de pulmón, algo muy similar a la trama de la película, en la que un padre viudo de pocos ingresos ve con desesperación como su hija necesita de un trasplante de hígado para sobrevivir. 

Swank interpreta a una estilista que, mientras batalla con su propia adicción al alcohol, decide ayudar a esta familia a superar sus obstáculos. 

¿Es difícil interpretar a una persona de la vida real, mientras se lidia con una carga personal tan grande? Sobre eso y más conversamos con la galardonada actriz en la entrevista del video adjunto.

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