Por Susana Peña Nassar |11 de diciembre de 2019, 7:01 AM

Desde 1960 es el sorteo más popular. Antes anunciaban el ganador así, con una pizarra y tiza, 59 años después las imágenes son muy diferentes, pero la expectativa y la emoción se mantienen intactas.

La probabilidad de ganar el “gordo navideño” es 1 en 100.000. Lo mismo que meter la mano en un quintal de frijoles negros y sacar el único grano blanco.

Es dos veces más probable chocar contra el tren en el área metropolitana que pegarse el premio mayor. Y cuatro veces más probable que le caiga un rayo.

Pero la suerte llega cuando menos se espera, sino, que lo diga doña Flor.

El 17 de diciembre de 1978 ella fue una de las afortunadas: una fracción del número 50 con la serie 204 le otorgó, en ese momento, ₡125.000.

Esta vecina de Escazú ganó compró su casa en ₡60.000 y le quedó dinero para suplir las necesidades básicas de sus cinco hijos.

41 años después todavía disfruta la mejor inversión que hizo con el dinero del premio mayor. 

Algunos ganadores de lotería no invirtieron su dinero de la mejor forma. Se lo contamos mañana.