Por Gabriel Vargas |29 de junio de 2019, 15:47 PM

No se pudo, pero casi. Costa Rica se despide con la frente muy en alto de una Copa Oro llena de altibajos, gracias a un partidazo en Houston donde obligó hasta la tanda de penales, tras el 1-1 en el tiempo regular.

Entregados. Así se resume el juego de cada jugador de La Sele esta noche ante México.

Una vez más Costa Rica se creció ante los aztecas, jugó sin complejos y con una mejoría notable de lo que mostró en la derrota ante Haití el lunes pasado. ¿Por qué el cambio radical? Pasa por tema de orden táctico, actitud, y gracias a un Allan Cruz enchufado con Bryan Ruiz en el medio campo.

Fue un primer tiempo donde la Tricolor estudió a su rival y prácticamente regaló los primeros 15 minutos, sin permitir que México llegara con peligro al marco de Leonel Moreira. Poco a poco fue tomando confianza, impulsados por un Randall Leal acucioso, impetuoso y pícaro, sumado a lo que ya mencionamos de Allan Cruz. Ida y vuelta, pulsaciones al máximo y un vertiginoso cierre de primer tiempo puso los nervios de punta en el NRG Stadium de Houston.

Empero, una vez más tenía que ser Keysher Fuller. El lateral derecho de Matosas para este juego perdió el balón en el medio campo, y con total desgano permitió a Rodolfo Pizarro avanzar hasta 30 metros hasta el área tica, quien sirvió para Raúl Jiménez y con total tranquilidad bajo la mirada de Duarte controló, remató y sentenció el 1-0 al 44’.

Costa Rica no se achicó. A pesar del doloroso golpe ya en el epílogo de la primera parte, la Tricolor saltó al campo en la segunda mitad con mucha personalidad y con cara al frente. Leyó muy bien que a México le costaba el balonazo largo a las espaldas, y fue ahí donde Joel Campell econtró la vía del empate, cargado de polémica.

El delantero de La Sele batalló solo contra dos mexicanos, robó el balón y se enfiló al marco de Guillermo Ochoa. Luis Rodríguez intentó bajarlo y lo hizo con falta, fuera del área, pero el árbitro panameño Jhon Pitti (de pésima labor esta noche) sancionó penal, que el capitán Bryan Ruiz se encargó de marcar para el 1-1 al 52’.

Ya con el empate, Costa Rica encimó aún más hasta tener a México en su área, pero no aprovechó. Los aztecas no querían los tiempos extra y buscaron el gol por cualquier vía, pero entre la imprecisión y un Leonel Moreira aplomado, se vieron ahogados en su propia impotencia. Así llegaron los tiempos suplementarios.

Fue ahí donde México controló a La Sele, tuvo mayor presencia ofensiva y nos hizo sufrir. Pero Costa Rica supo aguantar el asedio azteca principalmente en el primer tiempo extra. En el segundo fue Costa Rica el que encimó, y gracias a un tapadón de Ochoa tras remate de Jonathan McDonald el juego se fue a los penales.

Ya en la tanda decisiva, Leonel Moreira se perfilaba como héroe al taparle el penal a Raúl Jiménez, pero Randall Leal echó todo por la borda al enviar su lanzamiento por fuera del marco de Memo Ochoa.

Ya en la muerte súbita, fue Keysher Fuller el que vio como Ochoa detuvo su penal y sentenció así la eliminación de una Tricolor aguerrida, y que se despide dejando dudas por su irregularidad de un juego a otro, pero dejando sensaciones de mejoría por lo mostrado ante los aztecas.