Tía Zelmira: La tía no tiene quién le escriba

 Rogelio Benavides Rivas/Editor/[email protected]

Cumpleañeros 

Saludo efusivamente a mi buena amiga la empresaria e intelectual Sara Gordon,  quien cumple años este viernes 17 de junio. Mención especial para mi colega José Manuel Peña Namoyure, quien cumple 70 años. También están de celebración esta semana Viviana Oliver (cumple el 17 de junio), Peggy Angulo (17), Edgardo Camacho (18), Melvin Molina (18), Rina Vega (18), Kathia Valverde Madrigal (19), Rebeca Valerio (19), Daniel Quirós (20), Patricia Figueroa (21), Gabriel Molina (21), Cynthia Briceño (21), Andrea Salas (22), Pedro Capmany (22), El Maleku de Omega (22) y Yokebec Soto (23).
 
¿El sapo y la culebra? 

Sorprendentes son las imágenes subidas por Diego Bravo en sus plataformas, donde aparece bromeando con la presentadora Keyla Sánchez, quien ha tenido varios enfrentamientos con el "Zar de los chismes". Diego se la topó en la actividad organizada en el Estadio Nacional el 14 de junio, para seguir el juego clasificatorio de Costa Rica para el Mundial de Futbol en Catar. Diego detectó a varios famosos y algunos no le hicieron muy buena cara, más bien lo evitaron, pero cuando se encontró con Keyla —una de las habituales en sus videos de chismes— de una vez le pidió permiso para tomarse unas fotos; ella accedió de inmediato y hasta hizo bromas en cada uno de los encuadres. 

Keyla Sánchez y Diego Bravo el 14 de junio.

Las imágenes nos hacen pensar en un encuentro tranquilo, sin dramas ni mucho teatro. Según los murmullos en los pasillos de Teletica, Keyla se alista para debutar en "Calle 7", que Gabriela Solano estrenará el próximo 11 de julio, a las 11 a. m.; en el espacio estarán María Teresa Rodríguez, Jennifer Segura, Pablo Cartín y Keyla. Por su parte, Diego estrenará "El Chisme Bravo", el 30 de junio, a las 9 p. m. en TDMás. Por el momento, debemos esperar nuevos episodios de esta telenovela. ¿Será Keyla la primera invitada al programa de Diego?

Diego Bravo se encontraron en el Estadio Nacional y no hubo caritas. 

La tía no tiene quién le escriba 

Desde 1994 escribo esta columna semanal dedicada a "Tía Zelmira". Me gusta el ejercicio de redactar porque siempre es un reto. Ignoro si antes era más difícil o más fácil escribir, pero realmente muchas cosas han cambiado.
 
Siempre escribo para divertirme y para tratar de divertir a los demás. Nunca me ha impulsado el deseo de molestar o lastimar. Cuando comencé, inventé un mundo de situaciones y personajes, porque había muy poco material informativo, para llamarlo de una manera más profesional. Poco a poco fui descubriendo canteras llenas de situaciones inéditas y cosas sencillas para compartir con los lectores.
 
Recuerdo el despegue de “la avioneta set” —porque el material no alcanzaba para ser “jet set”—: había un presidente, una vicepresidenta de la avioneta set, eso sí, no había tesorero, porque no había dinero. Aquí mismo hacía un recuento de las actividades sociales y faranduleras. Era muy duro raspar la olla para encontrar noticias. Entonces saqué de mi chistera las Fiestas de Negro; un encuentro de todos cuantos estaban involucrados en la industria del entretenimiento como modelos, cantantes, presentadores, productores, maquillistas y otros artistas. También estos saraos permitían recolectar juguetes para entregar en diciembre a niños en riesgo social. Esas exitosas realidades ya forman parte del pasado, no tienen presente.
 
Hacer una Fiesta de Negro en estas épocas sería muy difícil, gente y ganas hay, pero ahora, con tantos influencers en las redes antisociales, no cabrían ni en el Parque Viva, tan amplio y tan cómodo. Si a lo anterior le agregamos el tema del COVID-19 con todo y mascarillas, sería más difícil, pues uno de los propósitos de aquella reunión era convocar caras nuevas con sonrisas incluidas.
 
La tía casi no escribe, porque ahora todos escriben en sus perfiles, bien o mal, pero escriben.
 
Por interés profesional reviso todas las publicaciones en redes y en medios impresos y tradicionales y todos hablan y dan vuelta sobre lo mismo. Examino hoy los perfiles en las distintas plataformas o en los sitios electrónicos y al día siguiente sale lo mismo en los periódicos. Algunos de mis colegas, obligados a conseguir material suficiente para una página diaria, revisan de cabo a rabo las publicaciones virtuales y eso es suficiente para cumplir con su cuota, por eso, están como están, por eso, cada día tienen menos publicidad y menos papel.
 
Los medios no han encontrado la fórmula para ganarle a las redes sociales. Podría ser al revés. Deberíamos estar viendo en los sitios electrónicos comentarios o seguimiento a las noticias impresas, pero la realidad es otra.
 
Mis colegas periodistas cada vez tienen menos tiempo y menos ganas para salir en busca de material informativo, novedoso y exclusivo. Es más sencillo sentarse a revisar, desde su computadora o su teléfono, los perfiles de famosos.
 
El reto es en serio. Cuando me pongo a organizar el material para esta columna, debo desechar la mayoría de las ideas, porque ya salieron en algún lado, no importa si tiene errores o si es una falsedad; la velocidad cuenta más, para ganar la carrera y obtener más likes o sumar seguidores.
 
La semana pasada ocurrió un caso en una dirección contraria a la relatada anteriormente. Un periódico publicó en su sitio web una noticia falsa. Como era de un medio tradicional, y se espera la aplicación de los valores objetivos de la noticia antes de divulgarla, muchos sitios e influencers le hicieron eco al rumor; sin embargo, cuando se supo de la inexactitud de la información, ninguno rectificó; eso sí, el periódico no publicó esa nota al día siguiente. Tampoco supimos si aquella falsedad fue un globo de ensayo a una trampa para plagiadores y copiones.
 
Debemos ser más celosos y más cuidadosos a la hora de informar, a la hora de
seleccionar los temas noticiosos para evitar caer en la trampa de los tendenciosos. Hay un universo informativo en las redes, pero debemos recorrerlo con mucho cuidado, porque además de gente tendenciosa y peligrosa, hay miles de sitios falsos.
 
Seguiré tratando de escribir con honestidad, claridad y profesionalismo, para ser consecuente con las enseñanzas de esta hermosa profesión del periodismo. 

Tía Zelmira caricaturizada por Juan Gha.

La lucha de Camilo Rodríguez 

En la columna anterior mencioné la lucha del periodista y escritor Camilo Rodríguez, para que el Patronato Nacional de la Infancia (PANI) le permita ver regularmente a sus hijos, en especial a su pequeña Montserrat. Camilo ha hecho de todo —hasta se disfrazó de uno de los personajes de Johnny Depp— para lograr su objetivo. Sin embargo, los medios ignoran a Camilo, quien representa a muchos padres divorciados a los que tampoco les permiten ver a sus hijos o enfrentan situaciones similares. Tras la publicación de esa nota, una colega funcionaria del PANI, envió un derecho de respuesta, que publico seguidamente en forma íntegra. Yo puedo tener mi opinión sobre cualquier tema, pero si alguien se siente ofendido o afectado, debo darle espacio a su reclamo. Esto, lamentablemente no se ve —como les decía en el tema anterior— en las redes sociales, porque si alguien reacciona a una publicación y la comentan para rechazarla o aclararla, el autor y dueño del perfil, lo puede bloquear. 

Camilo Rodríguez se disfrazó como uno de los personajes de Johnny Depp.

Respuesta del PANI sobre Camilo Rodríguez 

Hecha la anotación, les dejo la nota del PANI que dice: Respecto de la publicación titulada “Camilo Rodríguez se disfraza para protestar”, del viernes 10 de junio, es necesario aclarar que: 1. El Patronato Nacional de la Infancia (PANI) tiene la responsabilidad legal de brindar protección a los niños, niñas y personas adolescentes en situación de riesgo y vulnerabilidad y su accionar, como institución pública, está sujeta a la rendición de cuentas y la transparencia. 2. EL PANI reconoce el derecho de los y las ciudadanas a la libertad de expresión y a solicitar, por las vías administrativas y judiciales establecidas, la revisión de las acciones y decisiones tomadas. 3. Cada uno de los casos de los participantes de esta y otras manifestaciones han sido revisados por la administración y cuentan con resoluciones judiciales (depósitos judiciales, declaratorias judiciales de abandono y denuncias penales, entre otras) que avalan la intervención realizada para cumplir con esta responsabilidad. Sin embargo, la administración continúa abierta a la revisión de situaciones que se consideren. 4. Respecto de los casos concretos, por respeto al derecho a la integridad, privacidad, honor e imagen de las niñas, niños y personas adolescentes, no se brindan datos específicos sobre la intervención con las familias. Sin embargo, la frase “… el PANI no le permite ver ni interrelacionarse con su hija Montserrat…” no corresponde con la verdad real de los hechos. 5. Asimismo, sobre la frase “…lo que le ha llevado a sumar 32 días de encadenarse frente a los portones del Patronato Nacional de la Infancia (PANI)”, es necesario aclarar que el señor ha visitado las instalaciones de manera continua, utilizando las cadenas, mientras hace las grabaciones de video y audio que difunde es sus propias redes sociales. De usted con toda consideración. Fanny Cordero Jiménez, encargada de Comunicación y Prensa PANI.
 
Con esa regañada, pongo punto final a mi columna de esta fecha.
 
Eso es todo, los quiere, Tía Zelmira, la que todo lo mira.