Viceministro tras muerte de detenido en Pavas: "Este tipo de situaciones no se pueden tolerar"
Hay nueve oficiales investigados por la muerte de un hombre que estaba arrestado en una delegación.
Por: Mónica Matarrita
El viceministro de Seguridad Pública, Erick Lacayo, lamentó el accionar de los policías detenidos esta mañana acusados de matar a golpes a un hombre que estaba detenido en la delegación de la Fuerza Pública de Pavas. El jerarca aseguró que este tipo de incidentes no pueden ocurrir de nuevo.
"Es poco usual, es algo que prácticamente teníamos desechado desde nuestro comportamiento interno desde hace muchos años atrás", dice Lacayo.
Desde Seguridad Pública destacaron que están trabajando en la investigación interna, a través del "debido proceso" para poder sancionar a los responsables del homicidio.
"Este tipo de situaciones no se pueden tolerar, hay un esfuerzo muy importante de todos los hombres y mujeres de la Fuerza Pública, de lunes a lunes, de domingo a domingo, trabajando 24 horas del día para genera la contención de criminalidad y llevar la tranquilidad al país", añadió el viceministro.
Según el director de la Policía Judicial, Randall Zúñiga, cinco oficiales de la Fuerza Pública agredieron al ahora fallecido en reiteradas ocasiones y otros cuatro no hicieron nada.
El ofendido fue identificado como Henry Reyes Corrales, de 44 años, quien fue detenido el domingo 9 de febrero por aparente violencia doméstica.
“Hoy realizamos una detención de 9 oficiales de Fuerza Pública por el asesinato de un hombre de apellido Reyes, el pasado 9 de febrero. El sujeto llega bien a la delegación y cuando es detenido, al parecer, varios policías lo agredieron.
“Tenemos a cinco actores que los agreden y cuatro mas que los detenemos por omisión porque ven que lo están agrediendo y no hacen nada. Una de las detenidas es una funcionaria policial quien aparentemente incluyó datos incorrectos en la bitácora del día de la guardia”, dijo Zúñiga.
El director del OIJ confirmó que Reyes Corrales estaba solo en la celda al momento de sufrir la brutal agresión.