Por Luis Jiménez |18 de marzo de 2025, 9:28 AM

"Un vecino violó, mató y enterró a mi hija en una finca", denuncia con dolor Sady Fernández Valle, madre de Yendry Francini Loaiza Fernández, de 16 años. Han pasado más de cinco años y aún espera justicia por su asesinato.

Fernández conversó con Teletica.com y aseguró que el caso no avanza, por lo que pide celeridad a la justicia costarricense.

"Nosotros tenemos cinco años y seis meses esperando que se haga justicia, hasta el momento ni se ha hecho nada, y nosotros queremos que esto llegue ya a justicia. Que agarren esos carajos y que los encierren por lo que ellos le hicieron a mi hija", declaró Fernández.

Según la madre, el 22 de agosto de 2019, Yendry salió de su colegio a las 5 p.m. Al notar su ausencia horas después, la familia inició una búsqueda desesperada. "Siempre llegaba a casa a esa hora. Como no sabíamos nada de ella, comencé a llamarla y le mandé un mensaje: 'Yendry, véngase porque ya su papá está bravo', pero nunca contestó", recordó Fernández.

Yendry Francini Loaiza Fernández

Este fue el último día que vieron con vida a Yendry, quien iba en su bicicleta.

Fernández señaló que los presuntos responsables del crimen eran vecinos de la familia. Ocho días después de la desaparición, el cuerpo de Yendry fue hallado enterrado en una finca a cuatro kilómetros del colegio.


 "Sabemos quiénes son los asesinos, son dos personas que eran vecinos de nosotros. Uno de ellos llegaba a nuestra casa, donde también almorzaba y le dábamos café. Nunca llegamos a pensar que él nos iba a hacer este gran daño", afirmó la madre, asegurando que uno de los sospechosos se habría obsesionado con su hija.

El abogado de la familia, Joseph Rivera, confirmó que los implicados siguen en libertad.

"Estos sospechosos del asesinato de Yendry están sin medidas. Cuando se les detuvo en agosto de 2020 por los hechos ocurridos, hicimos una solicitud a la Fiscalía de prisión preventiva, pero los soltaron 48 horas después de que los indagaron.

"Ella fue engañada por un hombre de 20 años cuando llegó a la finca a cuatro kilómetros del colegio. La estaban esperando dos hombres, ella pegaba gritos y uno de ellos le hizo candado chino y la asfixió. Cuando estaba muerta, uno de los imputados mandó al otro a traer una pala y al día siguiente la enterraron en la finca", manifestó Rivera.

El caso también ha estado marcado por amenazas de muerte contra la familia de Yendry. "Incluso intentaron asesinar a su padre en un ataque armado en Batán, Limón. Buscaban eliminar testigos, pero no lo lograron", añadió.

"Esto es un homicidio calificado y vamos a pedir 35 años de cárcel contra cada uno porque los dos actuaron en común acuerdo", agregó Rivera.

Rivera confirmó que la acusación ya fue presentada ante el Juzgado y que solicitarán una condena de 35 años para cada sospechoso. La familia de Yendry sigue esperando la fecha del juicio y exige justicia.

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