Sobreviviente de accidente aéreo recibe atención emocional y especializada en Hospital del Trauma
La paciente, una mujer de 31 años identificada como Paola de Los Ángeles Amador Segura, fue trasladada al centro médico el martes por la tarde en condición estable.
La única sobreviviente del trágico accidente aéreo ocurrido el lunes en el cerro Pico Blanco, Escazú, está recibiendo atención médica especializada y emocional en el Hospital del Trauma del Instituto Nacional de Seguros (INS).
La paciente, una mujer de 31 años identificada como Paola de Los Ángeles Amador Segura, fue trasladada al centro médico el martes por la tarde en condición estable tras haber ingresado en horas de la mañana en estado crítico al Hospital San Juan de Dios.
Kenneth Rojas, director de la Red de Servicios de Salud del INS, indicó que la paciente está recibiendo atención integral.
“La paciente sobreviviente de un accidente aéreo del lunes se encuentra con nosotros desde este martes, está ingresada en el Hospital del Trauma en una condición estable. Está recibiendo todos los tratamientos por parte de especialistas y equipo interdisciplinario, incluyendo exámenes de diagnósticos y además está recibiendo soporte emocional, ella y su familia”, dijo Rojas.
Rojas también señaló que Amador está siendo atendida bajo la póliza de Riesgos del Trabajo, ya que el accidente ocurrió en el contexto de su labor.
"En el hospital del trauma tenemos acceso a especialistas en ortopedia, maxilofacial y demás especialidades que ella requiera. De ser necesario realizarle una cirugía, aquí también tenemos especialistas para ello", agregó Rojas.
Amador expresó en una conversación con los médicos que prefería no brindar detalles específicos sobre su estado de salud, según Rojas.
El accidente involucró una aeronave tipo Cessna 206, matrícula TI-GER; desapareció el lunes alrededor de las 12:30 p.m. mientras volaba de Barras de Tortuguero al Aeropuerto Internacional Tobías Bolaños, en Pavas.
La aeronave se estrelló a unos 7.000 pies de altura, en una zona montañosa de difícil acceso, dejando un saldo de cinco personas fallecidas: el piloto, Mario Miranda Ramírez (40 años), y los pasajeros Ruth Pamela Mora Chavarría (27 años), Jean Franco Segura Prendas (28 años) y Gabriela Calleja Montealegre (64 años).
Las causas del siniestro aún están bajo investigación.
Mientras tanto, la sobreviviente continúa recibiendo atención especializada para su recuperación, un caso que genera tanto esperanza como conmoción tras el lamentable suceso.