Por Álvaro Sánchez |10 de julio de 2018, 13:22 PM

Tras casi seis años desde que se colgaron sus fotografías en la página de Interpol, el Organismo de Investigación Judicial y la Fiscalía siguen sin saber con exactitud el paradero de los padres y la esposa del costarricense Alejandro Jiménez González, alias el Palidejo.

Jiménez cumple sentencia en Guatemala por el atentado contra el empresario nicaragüense Henry Fariñas, donde murió el cantautor argentino Facundo Cabral, el pasado 9 de julio de 2011, en Guatemala.

Sus padres son investigados por el delito de legitimación de capitales.

A inicios del 2016 se recibió la última información confidencial en torno a una posible ubicación de estas personas, pero fue descartada.

Es decir, ya pasaron casi dos años de silencio absoluto.

Ese mismo año fue sentenciado en Guatemala el Palidejo y tras declaraciones que dio a Telenoticias sobre sus padres también se hicieron algunas diligencias que resultaron en nada.

Telenoticias consultó al OIJ y a la Fiscalía cuántas informaciones confidenciales han sido verificadas desde el 2012, pero no supieron dar respuesta. Por medio de un correo electrónico, la oficina de prensa indicó que el conteo debía hacer se forma manual y el expediente está en manos de la Fiscalía.

Por su parte, en la oficina de asesoría técnica y relaciones internacionales de la Fiscalía indicaron que quienes reciben los datos confidenciales son los agentes judiciales.

Según consta en registros migratorios, el padre de Jiménez registra, al menos, 12 salidas y 11 entradas al país.

El último informe de su registro migratorio es del 17 de julio del 2011, por el aeropuerto internacional Juan Santamaría.

Las informaciones confidenciales que se recibieron entre el 2012 y el 2016 llevaron a la policía a hacer consultas a sus homólogos en Panamá, El Salvador y Colombia.

En todos los casos se descartaron posibles ubicaciones.

Actualmente varias de las propiedades a nombre de los padres del Palidejo y su esposa están en manos del Instituto Costarricense sobre Drogas.