OIJ sospecha que asesinato de exagente en Ticabán fue “venganza” de delincuentes
Familiares de Ruddy Campos Morales aseguran que él se volvió “el protector y vigilante del barrio” tras su renuncia a la Policía Judicial.
Un exagente del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), vecino de Ticabán de Pococí, Limón, fue asesinado de 25 balazos, en enero pasado, aparentemente como venganza por enfrentarse a asaltantes y a extorsionadores de la zona.
Su familia y los vecinos lo recuerdan como un valiente protector y vigilante del barrio, labor que realizaba ad honorem, tras su renuncia a la Policía Judicial. Ruddy Campos Morales también organizaba actividades para la comunidad de El Porvenir de Ticabán.
“Lo que puedo destacar de Ruddy era ese amor para servir al pueblo, él todavía tenía la convicción de que podíamos hacer la diferencia. El policía nunca salió de su cuerpo, de su forma de actuar”, contó Yéssica Campos, su hermana.
Él trabajó como agente de protección de víctimas y testigos durante sus últimos años en el OIJ. Decidió dejar la institución para dedicarse a un proyecto personal y cuidar de sus padres.
A pesar de esto, nunca dejó de ser policía y se enfrentó varias veces a delincuentes que atacaban en su comunidad.
El 16 de enero pasado, una persona le disparó en al menos 25 ocasiones, en el momento en que ingresaba a la casa de sus padres.
Las investigaciones tras el crimen han dejado dos hipótesis para la Policía Judicial: una, como ya se mencionó, la venganza por enfrentarse a delincuentes y tratar de mantener la paz en el lugar; pero también se explora la posibilidad de un conflicto por algunos bienes.
“Nosotros no vamos a descansar, dentro de nuestras posibilidades, en colaborarle al OIJ. Han hecho un gran trabajo, hemos sentido el respaldo total de las autoridades”, agregó Campos.
La familia también hace un llamado a la comunidad: hacer llegar información valiosa para la investigación, en caso de tenerla.
Cualquier dato que tenga, usted lo puede brindar de forma confidencial al 800-8000-645.