¿Cómo perciben los guanacastecos su seguridad ciudadana?

La celebración del bicentenario de la Anexión del Partido de Nicoya a Costa Rica siempre inspira un ambiente festivo en Guanacaste, sin embargo, también propicia una reflexión profunda sobre diversos aspectos de la vida en la provincia.

La seguridad ciudadana ocupa un lugar destacado en las preocupaciones y percepciones de los guanacastecos.

Varias voces locales han manifestado sus opiniones sobre cómo ha evolucionado la seguridad en la región. 

"Hemos visto cambios significativos en estos 200 años, pero la seguridad sigue siendo un tema delicado para nosotros y ahora nos roban hasta en nuestras propias narices", comentó Sobeida Gómez, residente de Nicoya.

A lo largo de los años, los guanacastecos han enfrentado diversos retos, desde la delincuencia común hasta problemas más complejos relacionados con el narcotráfico.

Teletica.com entrevistó a un guardavidas, a una comunicadora de profesión, también a un guardaparques y a una cocinera de gastronomía típica guanacasteca que vende sus productos en el cruce de la carretera que une a Nicoya con Hojancha, para conocer, en la voz de los locales, cómo perciben la seguridad en la provincia.

Pablo Sánchez, guardavidas de Playa Sámara, comentó que en general las playas son muy seguras.

“En las playas puedo decir que no hay inseguridad, lo que sí hay es mucho narcotráfico, pero más que todo en Nosara y Guiones. Sin embargo, la gente puede caminar por las calles y playa porque es seguro porque la inseguridad no es delincuencia como robos y hurtos, sino el tema de drogas, más que todo en las noches.

“Durante el día vemos policías, hay cámaras de vigilancia en muchos lugares y hasta en la playa y me parece que eso lo hace más seguro. Yo también tengo un negocio de surf porque he nacido y crecido aquí y, de acuerdo con mi experiencia, todavía es muy seguro porque no hay robos en la playa. Es más que todo un tema de las noches y uno escucha comentarios que, a altas horas, las pandillas que andan van hasta armadas", dijo Sánchez.

Por su parte, Sobeida Gómez, quien se dedica a la gastronomía típica desde hace muchos años, considera que recientemente se ha empezado a percibir más la inseguridad y cree que es por las personas que llegan desde otras provincias y no por la población de Guanacaste.

“Últimamente, nos visitan de otras regiones, lo que hacen es involucrar a mucha juventud y este problema se ha incrementado mucho. Como guanacastecos estamos acostumbrados a vivir con las puertas abiertas, el patio abierto, sin embargo, la confianza se ha perdido desde hace algún tiempo para acá y ya no se puede vivir así porque es increíble que el simple hecho de salir a la pulpería ya se siente la insegura a ciertas horas de la noche.

"Hay mucha droga y últimamente el robo es descarado porque en las casas lo que nunca se veían, como son las cámaras de seguridad y alarmas, ahora sí lo vemos y es porque todo ya cambió y te roban en las narices, ya sea de día o de noche”, dijo Gómez.

Según la percepción de esta oriunda de Nicoya, su pueblo natal empezó a sufrir de inseguridad "de la noche a la mañana", aunque reconoce que la problemática no llega a ser extrema aún y cree que si el Gobierno toma cartas en el asunto se puede detener lo que para ella "está empezando".

Otra ciudadana que brindó su opinión es Raquel Barboza, una comunicadora y periodista de profesión, quien dice que, en términos generales, en Guanacaste aún tienen la dicha de vivir tranquilos; no obstante, asegura que de vez en cuando se presentan algunas situaciones que interrumpen esa sensación de calma que los acompaña a diario.

“En cuanto a la percepción de la gente, algo que sí se escucha con frecuencia en el pueblo es que muchas de las falencias en seguridad obedecen a los limitados recursos técnicos y humanos con los que cuenta Fuerza Pública; y que son cosas que están a vista de todos: patrullas deterioradas, pocos efectivos por distrito, delegaciones en malas condiciones, etc. Hay voluntad para trabajar, pero no siempre hay con qué hacerlo”, rezó Barboza.

Por su parte, Berny Apu, guardaparques del SINAC-MINAE, considera que no solo Guanacaste está sufriendo la inseguridad, pues se trata de un fenómeno que se está dando con mucha fuerza en todo el país.

“Lo que más nos ha perjudicado en Guanacaste es el atraso en temas de seguridad en las comisiones políticas porque no avanzan, el trabajo de la policía (Fuerza Pública y OIJ) es muy bueno y estratégico, pero el problema es cuando llega a la Fiscalía porque no se terminan los procedimientos y ahí quedan en nada.

“Liberia, Nicoya y Santa Cruz, sobre todo en las costas, es donde se ha vuelto una zona campal, así como en Playas del Coco donde todo el mundo está con mucho miedo por los enfrentamientos entre las bandas que terminan matando gente. Faltan muchos recursos de la Policía, tanto en equipo como personal”, agregó Apu.

Algunos guanacastecos sienten que el gobierno central no siempre ha atendido adecuadamente sus necesidades en materia de seguridad.

A pesar de los desafíos, el espíritu de celebración y reflexión que inspira el festejo de estos 200 años de historia prevalece entre los guanacastecos. La Anexión del Partido de Nicoya no solo es un motivo de orgullo, sino también un recordatorio de la resiliencia y la capacidad de la comunidad para enfrentar y superar dificultades.

En resumen, la percepción de seguridad entre los guanacastecos refleja una mezcla de preocupación y esperanza. Si bien reconocen los problemas que enfrentan, también valoran los esfuerzos realizados y la importancia de la colaboración comunitaria y gubernamental para mejorar su calidad de vida. 

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