María del Milagro París alza la voz: "En Costa Rica es fútbol, fútbol y fútbol, luego otros deportes"
La leyenda del deporte tico hace una dura crítica en esta entrevista.
Hablar de María del Milagro París es de una verdadera leyenda del deporte costarricense. Comenzó su carrera a los 8 años, en 1973 logró el primer récord nacional en una piscina de 50 metros y ganó 13 medallas de oro y una de plata en los Juegos Deportivos Centroamericanos en Guatemala.
También ganó cuatro medallas en el Campeonato Centroamericano y del Caribe en Colombia y 10 medallas de oro y 3 de plata en los II Juegos Centroamericanos en El Salvador en 1977.
Fue la primera atleta costarricense en clasificar a una final olímpica en los Juegos Olímpicos de Moscú 1980. En dicha prueba ocupó el sétimo lugar en los 100 metros mariposa.
Como parte de su legado, la piscina en La Sabana lleva su nombre.
Teletica.com entrevistó a París y conversó sobre su actualidad y también el deporte costarricense.
—¿Qué se ha hecho usted?
Comencé a trabajar en una compañía farmacéutica y he formado parte de los miembros que estudian medicamentos en humanos y asegurándose que todo esté bien. En eso he estado en muchos años, he tenido suerte que muchos han sido aprobados y están en el mercado dentro y fuera de Estados Unidos y hay algunos que están funcionando actualmente.
—¿Cómo empezó esta pasión por la medicina?
Desde los tres años le dije a mis papás que me encantaba y me peleaba por todos los juegos de doctora, sin importar si eran míos o no. En todos los años en el cole me interesó.
—¿Cuándo decide que va a ser nadadora?
Vivíamos cerca del Colegio La Salle y parte de las vacaciones era meterse en la piscina del colegio, entonces muchas veces yo me quedaba y nadaba con el equipo del colegio, pero no era mucho tiempo. Yo combinaba natación con básquet y me dijeron que como estaba nadando podía ir a un torneo nacional de novatos, llegué y le dije a mi mamá.
El primer día solo mi mamá me llevó y decían que quién me entrenaba, ese fin de semana gané muchas pruebas, el segundo día sí fue mucha familia y mi papá no había ido el primer día porque él dijo que no iba a ser la primera persona que se tiraría a rescatarme de la piscina (risas). Luego, por los tiempos que yo había hecho, podía clasificar, logré clasificar.
Después de eso empecé a entrenar más formalmente, una cosa que me ayudó mucho es que alguna gente lo ve mal y otra bien, y es que no me gusta perder, siempre le ponía para que nadie me ganara.
—¿Cómo analiza el deporte tico en la actualidad?
Tal vez a mucha gente no le caiga bien lo que voy a decir, en Costa Rica es fútbol, fútbol y fútbol y luego otros deportes. El fútbol es más importante que todos los otros deportes. Ha costado poder mantenerlos, las instalaciones deportivas, que se tengan buenos entrenadores, que tengan la secuencia que se necesita , todo eso es parte del desarrollo del atleta y eso no se cuenta.
Algunas veces uno ve a nadadores o deportista temprano y ve potencial, pero muchas veces el potencial está ahí y la manera que se entrena puede ser el problema.
—¿Por qué ya no hay natación tica que compita contra la élite?
Yo pienso que como cualquier deporte se necesita mucha gente, es más fácil identificar los que pueden llegar al alto nivel, muchas veces no hay suficiente apoyo para los equipos nacionales. En estos días que he estado en Costa Rica he estado hablando con gente que ha estado trabajando y le pregunto que pasó con el este equipo, o con el otro, o si hay nuevos. Faltan más entrenadores que puedan ir a estos lugares, a piscinas y darle bulla.
—¿Pueden las autoridades apoyar más a los deportistas ticos?
Sí, esa es la cosa, la diferencia con otros deportes es que el nadador se empieza a identificar cuándo son adolescentes, uno empieza a ver los resultados a los 18-19 años, pero no alcanzan el pico luego de los 20 años.
—¿Qué significa para usted tener una piscina que lleva su nombre?
Es algo increíble, yo fui a una competencia en Guatemala con 13 medallas de oro y pusieron al presidente en la radio y me dijo: "¿Qué puedo hacer por usted?". Yo le dije: "Necesitamos una piscina olímpica pública". En ese momento solo existía una piscina olímpica en Cariari, luego hubo organizaciones, se donó el lugar y se ayudó con la construcción. Fueron muchos grupos que trabajaron.
—¿Cuál cree que es su mayor legado al deporte tico?
Es difícil, tiene muchas épocas. Demostré que una mujer puede llegar al alto nivel y como todo mundo iba a ver los juegos de fútbol, era importante tener una deportista que no era futbolista.
También los Juegos Centroamericanos y del Caribe que logré 13 de oro y una de plata. Luego los mundiales y los Juegos Olímpicos en los que compito en la final.
El apoyo que siempre tuve de los ticos, cuando gané las 13 casi que fue una procesión por los alrededores de Alajuela, Heredia y San José y la gente recibiéndome con flores y con todo y luego la gente llamaba o mandaba algo a mi casa.
—¿Cuál fue su mejor competencia, esa que dice que todo salió perfecto?
Los Juegos Centroamericanos porque gané 13 medallas de oro y 1 de plata, pero los Juegos Olímpicos fueron muy importantes por la actitud, uno llega y la meta era clasificar para estar en la final.
—¿Cuáles consejos le daría a los ticos?
Dedicación, si se deciden a practicar un deporte tienen que entender que sin disciplina no se logra nada, disciplina y dedicación. Uno tiene que darlo todo, es la única forma.
—¿Cómo se logra convivir con el dolor al ser un atleta que exige al máximo su cuerpo?
Yo pensaba que siempre había un final y ese era ganar, a veces había que tener que pasar por el dolor para ver el triunfo al final. Es algo de la dedicación que se tiene que tener. La gente que gana sufre, todos sufrimos de una manera y otra.
Había más de una vez que no podía subir ni las gradas del cansancio. Me ayudaban a subir las gradas porque empezaba a la madrugada y en la tarde también entrenaba.