Tica en Hawái: "Ni las cenizas quedaron de nuestro hogar"

Andrea Peralta, la costarricense que lo perdió todo tras los incendios en Maui, isla del estado de Hawái, Estados Unidos, asegura que “la situación es desesperantemente sombría”.

La mujer conversó con Teletica.com y relató la terrible situación que están viviendo y cómo el lugar quedó tan destrozado, que al inicio no pudieron reconocer los escombros de su casa.

“Mi esposo logró conseguir una bicicleta prestada para ir a ver cómo quedó la casa en estos días, logró entrar, tuvo que ponerse la bici al hombro para saltar árboles y escombros, pero al llegar al barrio fue increíble, tardó rato en lograr encontrar la casa, porque la destrucción es tal, que todo quedó irreconocible, no se distingue nada, ni las cenizas quedaron de nuestro hogar”, contó todavía muy afectada la tica.

Sin alertas ni orden de evacuación

Peralta cuenta que a cada rato sonaban las sirenas de evacuación para poner en práctica los simulacros, pero que el día del siniestro nada sonó, nadie alertó, y tras de todo, el paso por la única vía principal de salida estaba cerrado, por lo que muchos se tuvieron que devolver a sus casas.

“La comunicación fue pésima, ni entre Bomberos o Policías se podían comunicar, había un hermetismo y un descontrol total, los que pudimos salir a tiempo, lo hicimos porque salimos solo con lo que teníamos puesto.

“Imagine que nosotros teníamos un kit de emergencia muy completo, cargado con provisiones para no depender de nadie por mucho tiempo, ni eso pudimos sacar.

“Es por eso que mucha gente murió ahogada, porque la desesperación hizo que se tiraran al mar para buscar una luz de esperanza para salvar sus vidas”.

Cifra de muertos

Otro punto que explicó es que, aseguran, la cifra de muertos oficial de 100 que dice el Gobierno no es la correcta.

“Perfectamente pueden ser unos 700 muertos, por eso es que hay más 1.000 desaparecidos, pero el Gobierno no da los datos reales, cientos saltaron al mar y ni una tercera parte regresó. Familias enteras, adultos mayores, niños de brazos, gente que se tiró quemada al mar, se los llevó la corriente”, acotó.

Ayuda tardía

Andrea y sus vecinos afectados consideran que la ayuda llegó muy tarde.

“La ayuda llegó siete días después, ya para qué, imagínese que yo trabajo para una empresa de barcos mercantil, mi jefe se fue y de todos los barcos quemados logró recuperar uno, con ese y la poca gasolina que tenía logró salvar muchas vidas y sacar gente del mar, antes que cualquier autoridad se hiciera presente".

Años para recuperarse

Según aseguran, la recuperación se estima entre tres a cinco años, en especial porque la emergencia no ha terminado, todavía hay dos incendios grandes que están quemando al otro lado de la isla.

“Si el condado deja la burocracia, tardaremos años en levantarnos, empezando porque ahorita sigue prohibido acercarse a la zona, hay gases venenosos, miles de animales muertos, todavía faltan cuerpos por encontrar, cenizas que limpiar.

“El incendio fue tal, que yo todavía huelo a humo, y eso que me he bañado como 15 veces, pero el humarascal se quedó impregnado, yo estoy hablando ahora, pero tardé dos días en poder salir del shock. Ahora estamos hospedados conde una cuñada en California, logré salir con mi esposo y mis perros, pero mucha gente no tuvo la misma suerte, muchos niños quedaron encerrados en sus casas porque sus papás estaban trabajando y no les dio tiempo”, agregó.

Ticos en Maui

A pesar de que este medio hizo la consulta a Cancillería para saber cuántos ticos viven en Hawái y si todos están a salvo, el ministerio todavía no ha dado una respuesta.

Sin embargo, Peralta asegura que, en los 20 años que tiene de vivir ahí, solo había escuchado de dos ticos más, aparte de ella, que habitaran en Maui. Sin embargo, no sabe si están bien, ya que no ha escuchado nada todavía.

Generosidad da esperanza

Otro aspecto que resaltó la oriunda de Moravia, es la generosidad de las personas, incluso los costarricenses.

Asegura les han donado valijas con ropa a ella y su esposo Donald LaCaze, además de comida para los perros y otros artículos de primera necesidad.

“Yo sé que lo material se recupera, pero me duele mucho haber perdido las fotos de mi boda y mis papás. Sin embargo, acá gente es muy generosa, incluso desde Costa Rica he recibido apoyo, excompañeros de escuela y colegio que tenía años de no ver, se han contactado conmigo, muchos me dicen que están orando por nosotros y eso significa tanto”, acotó entre lágrimas la tica.

Vengan en unos años

Peralta concluyó pidiendo un llamado a los costarricenses para que, en unos años, cuando se logren levantar, vayan a visitar la isla, ya que su sostén económico viene principalmente del turismo.

“Por favor, la isla de Maui es 90% basada en hospitalidad y turismo, cuando nos levantemos les pedimos a todos los turistas que regresen, los estaremos esperando”, finalizó.

Si desea ayudar a esta familia, puede buscar a Mónica León en Facebook.