Reparación del puente de la platina llegaría 5 años y ₡7.500 millones después
El 14 de abril del 2009, los medios de comunicación informaban acerca de las presas que se produjeron por una platina que se desprendió del puente sobre el río Virilla.
El 14 de abril del 2009, los medios de comunicación nacionales informaban acerca de largas presas que ese día, desde las 6 de la tarde y hasta casi las 8 de la noche, se produjeron a raíz de una platina que se desprendió del puente sobre el río Virilla en la autopista General Cañas.
La mayoría de las publicaciones daban cuenta de la reapertura de la vía, y del daño que sería reparado al día siguiente. Sin embargo, como es conocido por todos, la reparación no funcionó, una, otra y otra vez.
Hoy, cuatro años, tres meses y 23 días después, la solución no llega pese a los cientos de millones de colones que se han gastado en las reparaciones; los cuales, más bien parece que han pasado entre las rejillas del puente y caído a la corriente del Virilla.
El CONAVI ha facturado, según datos facilitados por su oficina de Prensa, un total de ₡584.280.177 por la instalación de la rejilla metálica para sustituir la losa de este paso. Sin embargo, a este monto hay que sumarle los $4 millones que cobró la empresa Soares Da Costa.
Esta compañía brasileña fue la encargada de “reparar” la platina en el 2010, pero de nuevo los trabajos no tuvieron final feliz. Ahora, la calculadora debe seguir sumando, pues la Contraloría General de la República aprobó un incremento en el presupuesto para las obras en el puente.
Con la variación, los gastos por los trabajos en la estructura podrán llegar a ¢4.595 millones, sin embargo, el Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT) dijo que lograron adjudicar el proyecto a un menor costo, ¢4.392 millones, a cargo de la empresa CODOCSA.
Inversión vs mantenimiento
Guillermo Loría, del Laboratorio Nacional de Materiales y Modelos Estructurales (LANAMME), afirma que la raíz de este problema es fácil de hallar, y se encuentra en la falta de atención a la estructura.
“Se debe a la ausencia de mantenimiento de muchos años, esto ninguna estructura lo perdona”, aseguró el ingeniero, quien además afirma que luego vino una cadena de malas decisiones para reparar el fallo.
“La intervención de la rejilla fue una mala decisión. Ahora hay un nuevo diseño de ingeniería, mis compañeros en el LANAMME creen que esta parece una solución más sana”. Sin embargo, Loría subraya que al caso de la platina podrían sumársele otros, los cuales ya han advertido.
“Hay puentes que ya están para intervenciones mayores, tales como el del Saprissa (Ruta 32), sobre el Río Colorado (Ruta 1) y en la carretera a Limón (Ruta 32)”, detalló el experto, en relación con casos puntuales que han divulgado por medio de auditorías e informes.
En el MOPT confían en que los trabajos en el puente estén listos en el 2014. Eso sí, en ese momento la platina ya habrá cumplido cinco años de ser un dolor de cabeza, y el monto de lo invertido en ella llegará a ₡7.536.280.177.
Para compararlo con cifras similares, la construcción de 15 quirófanos en el hospital San Juan de Dios cuesta ₡6.900 millones. Es decir, en una operación sencilla se puede inferir que cada uno cuesta ₡460 millones, por lo que el dinero de la platina alcanzaría incluso para construir uno más.
Según Loría, es preocupante que se llegue a esta cifra, pues pese a que en ocasiones se deben hacer las llamadas inversiones mayores en puentes de este tipo, resulta mucho más barato darles el mantenimiento rutinario que requieren para que su vida útil se extienda por varias décadas.