Déficit fiscal podría complicar cumplimiento de metas económicas del Banco Central
Central augura un alto nivel de crecimiento con respecto al resto de América Latina.

Este miércoles ante el Consejo Presidencial Económico el gerente del Banco Central de Costa Rica (BCCR), Eduardo Prado, detalló que la economía costarricense crecerá más que la región y que se mantendrá una baja inflación de entre el 2% y 4%.
“Según las proyecciones, Costa Rica va a crecer un 3,6% en 2018, mientras que América Latina y el Caribe, así como Brasil, crecerán apenas un 1,9%. El resto del mundo crecerá en 3,9%; a esa última cifra se aproxima nuestro país”, aseguró el banquero.
Estas metas forman parte del Programa Macroeconómico 2018-2019 de la institución, pero según el economista de Ecoanálisis, Alberto Franco, los problemas fiscales del país podrían evitar el cumplimiento de estos objetivos.
“La palabra clave aquí es ‘confianza’. En la medida que los actores políticos logren enviar señales que tranquilicen y que mejoren la confianza en el futuro de la economía nacional, las posibilidades de crecimiento económico hacia adelante también mejorarán”, indicó Franco.
Prado indicó que las proyecciones del BCCR no contemplan los efectos de una reforma fiscal ni el uso de contratos de colocación de deuda interna. Por lo tanto, el déficit fiscal cerrará en un alarmante 7,1% del PIB a diciembre del 2018.
Señaló también que “un menor crecimiento del consumo y la inversión privada durante este año, podrían dificultar que el crecimiento económico iguale o supere el nivel que se observó el anterior, 3.2%”.
Sobre las metas inflacionarias, aseguró que “para que la inflación pueda mantenerse baja y estable, principal objetivo de la política del Banco Central, un ingrediente clave es corregir, de manera permanente, el desequilibrio en las finanzas del Estado”.
Acerca de esto el vicepresidente de la República y coordinador del Consejo Presidencial Económico, Helio Fallas, acotó que “el país requiere fortalecer el sistema tributario y ordenar el gasto público”.
Esta titánica labor caerá en manos del próximo presidente y su equipo de trabajo.
“Los planes de acción y equipos de gobierno en la nueva administración a partir de mayo próximo, influirán sobre la confianza que tenga el país de que el Central logre poner en práctica las políticas requeridas para alcanzar los propósitos enunciados en su Programa Macro 2018 a 2019”, concluyó Franco.