Campaña busca donantes para llevar útiles escolares a zonas vulnerables del país
“Para algunas familias, esto puede representar el ingreso de un mes”, según el encargado de Iriria, campaña que tiene la meta de llevar entre 1.200 y 1.500 paquetes escolares a lugares de difícil acceso.
Hace 13 años, en las comunidades de Yorkín y Gandoca, Talamanca, nació el proyecto Iriria, con la entrega de 80 paquetes escolares. Desde entonces, en una labor ininterrumpida, ha dejado una huella educativa distribuyendo 56 mil paquetes desde la Cordillera Talamanca hasta el Caribe Sur y las islas del Golfo.
"Es más que entregar útiles: cada paquete representa un niño o una niña en el sistema educativo. La exclusión escolar es multivariable en estas zonas, con limitaciones de servicios básicos, inestabilidad laboral y catástrofes climáticas. Aquí el acceso al material educativo es esencial para la permanencia de un niño en la educación", destaca Giovanni Rodríguez, coordinador del programa.
El nombre Iriria, inspirado en la tradición indígena bribri, simboliza esperanza, representando la figura mitológica de la "niña danta" que crea la Tierra. "Entonces, además, tiene todo un contexto de esperanza, de vida en las comunidades indígenas y es lo que es la educación para las personas: esperanza", agregó.
En 2010, un grupo de montañistas comprometidos dio origen al proyecto con la misión de llevar paquetes escolares a áreas de difícil acceso. Con el paso del tiempo, ha recibido el apoyo de empresas y organizaciones. Sin embargo, la pandemia impactó las donaciones, lo que provocó una disminución en su alcance.
“Durante la pandemia, todas las organizaciones con sentido social nos vimos impactadas, pero nos mantuvimos. Incluso, pudimos cubrir poblaciones con suministro de alimentos. Ahora, el desafío es volver a las cifras prepandemia, y para eso esperamos que más organizaciones se sumen este año”, explicó el encargado de Iriria.
Los paquetes contienen seis cuadernos, lápices de colores, lápices de escribir, tajador, borrador y un juego de geometría. Iriria recibe donaciones y compra los paquetes, asegurando que todos los niños reciban los mismos artículos, de la mejor calidad posible.
Rodríguez dijo que en este momento se están preparando para iniciar la recolección de la campaña 2023-2024 con una meta de entre 1.200 y 1.500 paquetes escolares que se distribuirán en las islas del Golfo de Nicoya, Térraba-Sierpe, Baja Talamanca, Alto Coén, zona de amortiguamiento del Chirripó y territorios de Sixaola.
Según el encargado del proyecto, en estas comunidades, cuando una familia tiene dos o más niños, el peso económico de los útiles puede ser insostenible y es ahí donde Iriria marca una diferencia.
“Hay casos donde la compra de los útiles escolares puede llegar a representar el ingreso mensual de una familia”, indicó Rodríguez.
Para financiar estos esfuerzos, Iriria busca donaciones económicas. "Creo que parte del éxito del proyecto es que destinamos todas las donaciones a la compra de material. No gastamos nada en logística, ya que hay donantes que nos proporcionan el camión, la lancha o el helicóptero", concluyó.
Aquellos que deseen contribuir a la campaña Iriria 2023-2024, pueden ponerse en contacto con Giovanni Rodríguez a través del número 8864-2518 o al correo [email protected].