Muller vuelve a deslumbrar e increíblemente vuelve a sorprender
Mientras las cámaras seguían a un Cristiano impotente Muller marcaba tres goles sin despeinarse, sin gritarle a la cámara o sin quitarse la camisa.

El problema podría ser que Thomas Muller sea alemán. Aunque en el mundo es conocido que los germanos son de los mejores del orbe nadie piensa en ellos como grandes animadores, tienden a ser aburridos.
Tal vez esta es la razón que al repasar la lista de los mejores artilleros el nombre de Muller parece perderse. Celebra sus goles sin mucho calor y no se ve como el tipo más simpático, pero es un delantero llamado a marcar época.
Con 20 años en el Mundial de Sudáfrica el artillero fue el máximo goleador, marcando en cinco ocasiones.
Su primer tanto lo conquistó ante Australia. En octavos de final Inglaterra lo sufrió dos veces y en cuartos fue un gol el que marcó contra Argentina.
Su último tanto lo consiguió en el partido por el tercer puesto, contra Uruguay.
Pero su éxito vistiendo la blanca es solo un reflejo de lo que ha conseguido con su club, en el que ha gritado gol 59 veces.
Por esta razón el acaba de renovar con el Bayern de Múnich hasta 2019, a pesar del interés de otros grandes equipos europeos como Barcelona, Manchester United o Liverpool, dispuestos a pagar los 40 millones de euros de su cláusula de rescisión.
Con este cartel llegó a Brasil 2014, liderando una Mannschaft con sed de gloria. Desde 1990 los germanos no saborean las mieles de la Copa del Mundo.
En medio de Messi, Rooney y Luis Suárez; Muller se perdió, pero al salir a la cancha en opuesto a Cristiano Ronaldo quedó claro quién vende millones en publicidad y quién es el goleador de sangre fría.
Mientras las cámaras seguían a un Cristiano impotente, Muller marcaba tres goles sin despeinarse, sin gritarle a la cámara o sin quitarse la camisa.
El récord histórico para goles en las copas del mundo son 12, marca que han alcanzado Ronaldo y el también alemán Miroslav Klose.
Con 24 años, un mundial y un partido Muller ya lleva 8, puede ser que pase los 12 y nadie se dé cuenta.