Un atentado en una misa católica en Filipinas deja cuatro muertos
El grupo Estado Islámico (EI) reivindicó este domingo un atentado con bomba cometido durante una misa católica en el sur de Filipinas.
Al menos cuatro personas murieron y decenas resultaron heridas el domingo por la explosión de una bomba durante una misa católica en una universidad del sur de Filipinas, una zona con presencia de grupos insurgentes, informó la policía.
La explosión, reivindicada por el grupo Estado Islámico (EI), ocurrió en la mañana, durante una misa en el gimnasio de la Universidad Estatal de Mindanao, en Marawi, la mayor ciudad musulmana del país.
El teniente general de la policía, Emmanuel Peralta, informó que cuatro personas murieron y que cerca de 50 resultaron heridas en la explosión causada por un artefacto explosivo. Un anterior balance indicó que había tres fallecidos.
El grupo yihadista EI indicó en un comunicado difundido en sus canales de Telegram que "los soldados del califato detonaron un artefacto explosivo frente a una gran reunión de cristianos (...) en la ciudad de Marawi".
Algunos responsables de seguridad habían señalado previamente que el ataque podría haberse producido en represalia de una serie de operaciones militares llevadas a cabo contra grupos islamistas en los últimos días.
El presidente Ferdinand Marcos condenó el ataque, que atribuyó a "terroristas extranjeros".
"Condeno en los términos más fuertes posibles los actos atroces y sin sentido perpetrados por terroristas extranjeros contra la Universidad Estatal de Mindanao", expresó Marcos en un comunicado.
La universidad también condenó "el acto de violencia", suspendió las lecciones y desplazó más personal de seguridad al campus, indicó la institución en un comunicado.
"Nos mantenemos solidarios con nuestra comunidad cristiana y todos los afectados por esta tragedia", agregó el comunicado.
Imágenes publicadas en Facebook por el gobierno provincial de Lanao del Sur mostraron al gobernador Mamintal Adiong visitando a los heridos por el ataque en un centro médico.
Chris Jurado, un estudiante universitario de 21 años, dijo a AFP desde la cama del hospital que la explosión ocurrió durante la primera lectura de la Biblia en la misa. "Ocurrió de repente, todos comenzaron a correr", relató.