Parlamento alemán puede votar el viernes sobre legalización de matrimonio homosexual
Los diputados alemanes allanaron este miércoles el camino para una votación el viernes en el Bundestag sobre la legalización del matrimonio homosexual.
Los diputados alemanes allanaron este miércoles el camino para una votación el viernes en el Bundestag sobre la legalización del matrimonio homosexual, después de que la canciller Angela Merkel cambiara de posición sobre este tema.
La legalización del matrimonio homosexual está prácticamente asegurada si se organiza bien la votación: una parte de los diputados de la Unión Demócrata Cristiana (CDU) de Angela Merkel están a favor y sus votos se sumarían a los de los demás partidos representados en la cámara baja del parlamento, que hacen campaña a favor de las bodas igualitarias.
Una comisión del Bundestag aprobó el miércoles remitir al pleno el proyecto de ley que autoriza el matrimonio a las parejas del mismo sexo y les otorga por primera vez derechos ampliados en materia de adopción, indicaron diputados tras la reunión.
"El camino está libre para la igualdad", tuiteó una diputada de los Verdes, Renate Künast, favorable al proyecto.
La inscripción del texto en el orden del día de la última sesión plenaria del Bundestag antes del receso veraniego no se oficializará sin embargo hasta el mismo viernes. Si se confirma, la votación se celebrará ese mismo día.
La votación, excepcionalmente, será nominal, precisó una diputada del Partido Socialdemócrata de Alemania (SPD), Christine Lambrecht.
El proyecto de legalización del "matrimonio homo", como le llaman en Alemania, debatido desde hace años, se aceleró a principios de esta semana tras el cambio de opinión de la canciller.
Opuesta durante mucho tiempo a la unión de personas del mismo sexo, Merkel se negaba hasta ahora a contrariar al sector más conservador de su electorado así como a su aliada bávara, la Unión Social Cristiana (CSU), muy tradicionalista en temas sociales.
Pero el lunes la jefa de gobierno se declaró por primera vez abierta a un voto "de conciencia" de los diputados conservadores, que no recibirán ninguna consigna de voto.
Su socio minoritario en la coalición gubernamental, el SPD, aprovechó la oportunidad para pedir que la votación se celebrara cuanto antes, lo que al parecer tomó por sorpresa a la canciller.
El malestar reina en las filas de la CDU, donde algunos diputados reprochan al SPD una "ruptura de confianza" a tres meses de las elecciones legislativas.
La adopción del matrimonio homosexual no figura en el programa de la coalición firmado por los dos socios hace cuatro años.