La guerra en Siria: más de 210.000 muertos y un drama humanitario
De los fallecidos, 10.664 eran niños.
Más de 210.000 muertos, la mitad de la población desarraigada y un país en ruinas: desatada hace cuatro años, la revuelta en Siria contra el régimen de Bashar al Asad se ha convertido en una guerra devastadora.
Víctimas
El Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH), una ONG que se apoya en una extensa red de militantes y de médicos por todo el país, contabilizó entre marzo de 2011 y febrero de 2015 la muerte de 210.060 personas, incluyendo a 65.146 civiles, de los que 10.664 eran niños.
Entre los combatientes antirrégimen muertos, 38.325 eran rebeldes sirios y 24.989 yihadistas extranjeros.
Del lado de las fuerzas prorrégimen, la ONG da cuenta de 45.385 soldados muertos, 29.943 milicianos de las fuerzas de defensa nacional, 640 miembros del Hezbolá chiita libanés y 2.502 milicianos chiitas llegados de otros países.
El balance, subraya el OSDH, "es en realidad más elevado (...) a causa del gran número de desaparecidos cuya suerte ignoramos". Según la ONG, habría que añadir también a las 20.000 personas que están en las prisiones del régimen y que se consideran como desaparecidas.
Las ONG han informado de torturas y ejecuciones sumarias en esas prisiones.
Miles de personas han sido también capturadas como rehenes por grupos armados como el Estado Islámico (EI), quien siembra el terror en los territorios que controla.
Refugiados y desplazados
Más de 10 millones de personas han tenido que abandonar sus hogares, cuatro millones de las cuales están refugiadas en el extranjero.
Según la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), el 60% de los cerca de 23 millones de sirios son víctimas de la pobreza (septiembre de 2014).
Según sus últimas cifras (marzo de 2015), Turquía acoge a más de 2 millones de refugiados.
Según el Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (ACNUR), 1,1 millones de personas están refugiadas en Líbano, es decir, un cuarto de la población de este país. Esta cifra es probablemente superior pues numerosos sirios no se han registrado.
Además, 618.000 sirios están refugiados en Jordania, 225.000 en Irak y 137.000 en Egipto.
Los refugiados tienen que hacer frente a la pobreza, los problemas de salud y las tensiones crecientes con las comunidades de allá donde viven, en estructuras provisionales y en condiciones extremadamente difíciles.
Según Unicef, entre 2,1 y 2,4 millones de niños no pueden ir a la escuela por culpa de la inseguridad (enero de 2015).
Consecuencias económicas
Según los expertos, el conflicto ha provocado que la economía del país se sitúe en niveles de hace tres décadas. La mitad de la población está desempleada y la mayoría de las infraestructuras ha sido destruida.
Según el responsable del Fondo Monetario Internacional (FMI) en Oriente Medio, "el PIB se ha contraído más del 40%".
La suma de las destrucciones de la guerra alcanza 31.000 millones de dólares. El país también ha visto cómo su producción petrolera se ha hundido en un 96%, según fuentes oficiales.