Nicaragua: amenazan con aplicar ley a médicos críticos
Gobierno cita a galenos que critican la gestión de la pandemia y que cuestionan las cifras oficiales de la misma.
Las autoridades de salud de Nicaragua citaron este jueves a dos médicos críticos con el manejo de la pandemia, a quienes les advirtieron que estarían violando la polémica Ley Especial de Ciberdelitos, si no se ciñen a la información oficial.
El cirujano José Luis Borgen, dirigente de la Unidad Médica Nicaragüense, recibió la advertencia esta tarde al acudir a una cita extendida por la Dirección de Regulación Sanitaria y la Dirección de Asesoría Legal del Ministerio de Salud (Minsa).
"Lo que me dijeron fue que, básicamente, las expresiones que (se) están dando en algunas entrevistas, están diciendo cosas falsas, y que están creando alarma entre la población, prácticamente recordarte la Ley de Ciberdelitos, ley mordaza, y que el Minsa emite el mensaje semanal y que esa es la información que se debe manejar", dijo el médico a periodistas, al salir de la cita.
Según el diario local La Prensa, otros médicos independientes han sido citados en los últimos días "bajo la misma condición de secretismo" por parte del régimen.
La ley "mordaza"
La Ley Especial de Ciberdelitos, promovida por los sandinistas y en vigor desde el 30 de diciembre de 2020, establece penas de 1 a 10 años de cárcel a los ciudadanos que se les imputen los ciberdelitos que vayan contra la "seguridad del Estado".
La norma, compuesta por 48 artículos, plantea castigar con cárcel la propagación de noticias falsas y/o tergiversadas que produzcan alarma, temor, zozobra en la población o a un grupo o sector de ella o a una familia.
El pasado día 7 la vicepresidenta Rosario Murillo, acusó de ser "falsos médicos y con falsos pronósticos" a los galenos que critican la gestión de su esposo, el presidente Daniel Ortega, sobre la pandemia, así como las estadísticas oficiales de personas afectadas.
"Lenguaje subliminal"
Durante la entrevista sobre las críticas al Gobierno, Borgen dijo que "obviamente te recuerdan que el Minsa tiene la facultad de irte a revisar tu consultorio, tu clínica y otras cosas que dejaron así en el aire".
Al ser consultado por los periodistas si se trató de una intimidación, el médico afirmó que "de eso no hubo nada", pero que "solamente el hecho de decir que van a ir a revisar tu clínica, y uno lo entiende, el lenguaje subliminal que a veces se utiliza".
Este mismo jueves también fue citado el presidente de la Unidad Médica Nicaragüense, Carlos Quant.
El médico afirmó que la cita con la Dirección de Regulación Sanitaria y la Dirección de Asesoría Legal del Minsa fue con "carácter de obligatoriedad".
La Unidad Médica Nicaragüense está compuesta en su mayoría por profesionales de la salud que fueron despedidos después de abril de 2018, supuestamente por ignorar una orden del Gobierno de no atender a los opositores heridos en los ataques de policías y civiles armados contra manifestaciones antigubernamentales.
Las críticas por el manejo de la pandemia no se limitan a médicos opositores, pues abarcan a más de 30 sociedades médicas nicaragüenses, así como del Comité Científico Multidisciplinario y el Observatorio Ciudadano Covid-19.
Gobierno rechaza datos independientes
Las críticas consisten básicamente en que el Gobierno de Nicaragua supuestamente no ha establecido suficientes medidas para detener la propagación de la pandemia, promueve aglomeraciones, brinda información escasa y confusa sobre la situación, y no divulga los "datos reales" sobre el impacto del COVID-19.
Ortega, quien niega los datos pero no el manejo, ha denominado su plan como una "estrategia singular" para no afectar la economía del país.
Según los datos oficiales, el COVID-19 ha contagiado a 9.309 personas, y ha causado 194 muertes, exactamente una por semana desde octubre pasado, registros que los médicos no reconocen.
Por su parte el Observatorio, cuyos datos son avalados por parte del gremio médico, reporta 3.591 fallecimientos por neumonía y otros síntomas relacionados con el nuevo coronavirus, así como 19.537 casos sospechosos, datos que rechazan las autoridades.